Mis abuelos que no conocí
A mis abuelos no logré conocerlos, iba hasta la casa donde vivieron y ahí me ponía a pensar todo cuanto me contaron mis tíos, a lo que mis padres me narraban y solo ahora, cuando la edad es un filtro y un catalizador, reúno todas estas narraciones, la memoria oral que tanto nos hace falta, y voy destilando los recuerdos, también los que no me pertenecen. Armando un rompecabezas que se sigue moviendo, como las historia, como nuestro increíble andar.