El refranero popular esta lleno de frases sabias, no por trilladas menos sabias. Los estrategas del MAS deberían tomarse un tiempito en revisar un poco de esta sabiduría sencilla, a ver si así se les pega algo de sentido común. Mucho movimiento envolvente te puede llevar al desastre. Las intrincadas elucubraciones del genio matemático, parecen no estar dando resultados, quizás un repliegue estratégico no les vendría mal.
Quisieron madrugarnos a todos, cuando el manto de la noche aún no había sido rasgado por la luz del amanecer. Tal vez confundieron las cosas y mezclaron los refranes; creyeron que, “al que madruga… pájaro en mano”, y decidieron matar varios pájaros de un tiro. Ya el 2016 le pelaron feo, se apresuraron y quisieron echarle la culpa al empedrado, buscando la paja en ojo ajeno.
Se inventaron un “cartel de la mentira”, pero el caso es que, “en la boca del mentiroso hasta lo cierto se hace dudoso”, y le volvieron a pelar. Ahora han caído en la vorágine de la mentira, ya no pueden escapar de ella. Si a eso le sumamos la escaza o nula formación ética y moral de los dirigentes azules, y la pobreza intelectual de sus militantes, la cosa esta jodida.
Muchos masistas prefieren esconder la cabeza como el avestruz, por eso de que, “ojos que no ven, corazón que no siente”, pero, aun así, la cosa huele mal y es imposible no notarlo. Total, hazte el cojudo y vivirás feliz, mamando de las ubres del estado. El problema es que la vaquita está cada vez más flaca, los mamones le están chupando hasta el tuétano y el forraje se agotó.
El romance termino y la bonanza se esfumo. Y aquí estamos, como pan que no se vende, y de harina fiada. Ya nadie se traga el cuento del milagro plurinacional, de la economía blindada, del Jacha Uru prometido. Para lo único que sirvió tanta mierda, fue para engordar cerdos, la nueva burguesía azul, carente de escrúpulos y de vergüenza.
Que será de ti, “jefazo”, cuando tu estrella se apague, garañón sin hembras, pobre de espíritu, narciso sin belleza, mandón sin mando ¿volverás a tu chaquito tropical o sembraras coca en Chonchocoro? No lo sé, pero tu tiempo se agota
El refranero popular esta lleno de frases sabias, no por trilladas menos sabias. Los estrategas del MAS deberían tomarse un tiempito en revisar un poco de esta sabiduría sencilla, a ver si así se les pega algo de sentido común. Mucho movimiento envolvente te puede llevar al desastre. Las intrincadas elucubraciones del genio matemático, parecen no estar dando resultados, quizás un repliegue estratégico no les vendría mal.
Quisieron madrugarnos a todos, cuando el manto de la noche aún no había sido rasgado por la luz del amanecer. Tal vez confundieron las cosas y mezclaron los refranes; creyeron que, “al que madruga… pájaro en mano”, y decidieron matar varios pájaros de un tiro. Ya el 2016 le pelaron feo, se apresuraron y quisieron echarle la culpa al empedrado, buscando la paja en ojo ajeno.
Se inventaron un “cartel de la mentira”, pero el caso es que, “en la boca del mentiroso hasta lo cierto se hace dudoso”, y le volvieron a pelar. Ahora han caído en la vorágine de la mentira, ya no pueden escapar de ella. Si a eso le sumamos la escaza o nula formación ética y moral de los dirigentes azules, y la pobreza intelectual de sus militantes, la cosa esta jodida.
Muchos masistas prefieren esconder la cabeza como el avestruz, por eso de que, “ojos que no ven, corazón que no siente”, pero, aun así, la cosa huele mal y es imposible no notarlo. Total, hazte el cojudo y vivirás feliz, mamando de las ubres del estado. El problema es que la vaquita está cada vez más flaca, los mamones le están chupando hasta el tuétano y el forraje se agotó.
El romance termino y la bonanza se esfumo. Y aquí estamos, como pan que no se vende, y de harina fiada. Ya nadie se traga el cuento del milagro plurinacional, de la economía blindada, del Jacha Uru prometido. Para lo único que sirvió tanta mierda, fue para engordar cerdos, la nueva burguesía azul, carente de escrúpulos y de vergüenza.
Que será de ti, “jefazo”, cuando tu estrella se apague, garañón sin hembras, pobre de espíritu, narciso sin belleza, mandón sin mando ¿volverás a tu chaquito tropical o sembraras coca en Chonchocoro? No lo sé, pero tu tiempo se agota