Cuento
Felicidad Batista – España
Cuando la niña era niña, se inventaba cuentos para vivir los días. Cuando la mujer fue mujer, se inventaba los días para vivir los cuentos.
Ausencia
Patricia Nasello – Argentina
Lo busca entre los árboles, vocea su nombre, clama al cielo por él. Caperucita no acepta que el lobo ha muerto.
Descubrimiento
Norah Scarpa Filsinger – Argentina
Cuando Rodrigo de Triana avistó tierra, nosotros todavía estábamos allí.
Ni sobras
Camilo F. Cacho – Argentina
Siempre a nuestros pies. Con una mirada fiel y las patas levantadas en actitud de plegaria. Sabe que en algún momento llegará la recompensa.
El televisor habla de virus, contagios, muertes.
Sus ojos lánguidos y su osamenta cada vez más marcada no comprenden esas nociones.
Pero desde hace un tiempo siente chillar las tripas que recitan un quejido de hambre que se une al nuestro.
Cielo nublado
Rubén García García – México
Te desperté, tu cuerpo se tensa al escuchar mis pasos. Por un instante se abren tus ojos, pero vuelven a cerrarse. Pasaron los días en que comíamos ciruelas del mismo plato. Creí que había interrumpido tu sueño. Te veo y no estás. Piso como gato, como si no estuviese. ¿Quién ha cavado en nuestros cuerpos que solo ha dejado la soledad?
Cascarones de carnaval inundados de ausencia.
El hijo que un día deseamos, quizá leyó que era mejor volverse una estrella fugaz.