El contralor general de Venezuela, Elvis Amoroso, anunció este jueves la inhabilitación del líder opositor y presidente del Parlamento, Juan Guaidó, para el ejercicio de cargos públicos por 15 años, el máximo permitido por ley.
Amoroso dijo que en la declaración fiscal de Guaidó, reconocido por más de 50 países como «presidente encargado» del país, se habían detectado inconsistencias y que su nivel de ingresos no concordaba con el nivel de gastos.
«Ha realizado 91 viajes al exterior sin autorización de la AN (Asamblea Nacional) por un monto de 570 millones de bolívares que no puede justificar con su salario de servidor público», dijo Amoroso durante una rueda de prensa, recoge el diario venezolano El Nacional.
La contraloría venezolana estimó en 200 millones de bolívares los gastos de Guaidó por su permanencia en «hoteles de lujo» fuera del país.
El funcionario aseveró que estos gastos «no se corresponden» con los puede permitirse un diputado venezolano y agregó que se solicitará a los hoteles en los que se hospedó Guaidó dentro del país para aclarar cómo pagó el opositor su estadía, informa la Agencia Efe.
Amoroso no precisó desde qué fecha entrará en vigor la medida.
La inhabilitación de Guaidó sigue el patrón de las de otros dirigentes opositores durante el chavismo, que fueron apartados de la batalla política bajo acusaciones de corrupción.
En una intervención ante el público retransmitida por internet, Guaidó consideró que el anuncio de Amoroso es una «farsa».
«No existe contralor, no existe Constituyente, a ese señor lo activaron y sacaron el polvo para meterle miedo a los hoteles que nos alojaron», dijo Guaidó.
«El pueblo de Venezuela no se va a confundir con una falsa inhabilitación, con el cuento de que viajé por el mundo, sí viajé por el mundo, sí me reciben, por cierto, a diferencia de ustedes. Eso es lo que les duele».
Crisis venezolana
Guaidó se ha convertido en una de las figuras más destacadas de la actualidad venezolana y global.
Invocando la Constitución, Guaidó se declaró presidente interino del país el pasado 23 de enero para poner fin a lo que considera «usurpación» de Nicolás Maduro.
Entre los países que han apoyado a Guaidó se encuentran Estados Unidos, y la mayoría de los de la Unión Europea y Latinoamérica.
Maduro conserva el apoyo de Rusia, China, Cuba y Bolivia, entre otros, y considera que el desafío de Guaidó forma parte de un intento de golpe de Estado orquestado por la Casa Blanca.