Del Ruedo Ibérico
Miguel Sánchez-Ostiz La entrada me la da Cervantes, aunque con regustos de los esperpentos de Valle-Inclán: Y luego, incontinente, / caló el chapeo, requirió la espada,/ miró al soslayo, fuese, y no hubo nada. Fuese y no hubo nada, o muy poco. Pasó el Borbón emérito por las regatas de Xanxenxo por las que anduvo el Bribón, […]