De policías y escritoras

Dina Grijalva – México

Si existiera una policía literaria, mi vida peligraría: tengo muchos cuentos pendientes.

Abrazo virtual

Juan Martínez Reyes – Perú

Se abrazaron acongojados. El holograma de ella, lentamente se desvaneció. La Tierra había sido destruida.

En todas partes

Armando Alanís – México

Te vi en París, en Nueva York, en Londres, en las calles de la Ciudad de México, en algún barrio de Buenos Aires y en pueblos remotos. Te vi en todas partes. Pero no eras tú.

Cosas para el aprendiz – 2

Marti Lelis – México

Si vas a crear con las palabras, hazte de todas las que puedas. Consulta el Diccionario de María Moliner, y el de la RAE; diccionarios antiguos y nuevos. Busca las obras con riqueza de lenguaje; aunque tardes meses en leer un capítulo, busca todas las palabras que no conozcas y sus diferentes usos. Ahora el diccionario lo tienes siempre a la mano, no hay pretexto, sino flojera. Cuando hayas consultado todas las palabras del capítulo, léelo de nuevo: sentirás alegría. Parece nada, pero es el fundamento.

Doble fuego

José Antonio García Pérez – Cuba

En Cuba soy Ingeniero y también Periodista, con títulos en mano; aun así, sobrevivo vendiendo ron y haciendo servicio a domicilio.

El asfalto ebulle como lava, cuando a las 2 de la tarde, me salpican la ropa las llantas. Las manchas que deja el sol en los tobillos (entre pantalón y bota), me recuerdan los grilletes que, a la mente, me pone este país.

Río grande acabó y nunca supe cuando empezó, solo se aclimató el viento a fresco, y ya impera el calor. Sabes que ya no habrá primavera, que irás directo al verano, cuando en cuatro horas de camino, saludas tres incendios de manigua.