Al momento de escribir estas es el último día del año 2024, momento propicio para reflexionar de manera integral de las experiencias vividas sin darle una connotación de positiva o negativa/ buena o mala, sino vivencias que llevan a diversos aprendizajes; pero para llegar a ver el aprendizaje, es fundamental dar gracias por esas experiencias que son las adecuadas, porque te pueden hacer crecer integralmente o beneficiarte para mantener las mínimas condiciones para vivir dignamente.
Partiendo de lo antes mencionada, para lograr descifrar todo lo bueno recibido es indispensable que te tomes unos 5 minutos en el día, recorriendo aquellas experiencias que se destacaron en tu vida, preguntándote: ¿Cómo en esta situación Dios me habla? O ¿En esta situación dónde encuentro la luz?, esas dos sencillas preguntas, te permitirán ampliar la mirada de la conciencia para detectar lo maravillo de la vida como una muestra de amor de Dios contigo, a pesar que esas experiencias maravillosas no fueran a lo mejor como tú esperabas o fueran dolorosa.
Por último, otra forma de ver los beneficios de la vida cada persona puede comenzar en dar gracias por aun respirar (muchos mueren o están conectados a máquinas para hacerlo); por tener un techo para cubrirte del calor, frio o la lluvia; por tener comida, aunque no se aquello que deseo (aun millones de personas no tienen que comer), y así con todo aquello que tienes como los seres queridos, los bienes materiales y la FE que la Divinidad nos acompaña en medio de tanta turbulencia.
Ronald Valera es Filosofo.