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Cuento de Patricia Gutiérrez

Rojo en cuarentena

Un marrón oscuro -medio bordó- me llama a gritos desde su esquina. Un tinto. Y los tintos siempre me zafaron. Este tinto bordea al negro; como la pasión, como la muerte cuando araña zapatos que ya no uso. De una, y sin pensar dos veces siquiera, me lo puse. Lo vi en mis uñas. Un vaho áspero y alcoholizado empezó a treparse por mi cuerpo adormecido tras la monocromía de este encierro. Rojo intenso. Cincuenta años, mi primer rojo, y mi primera cuarentena.

Un silencio me cerca y arrincona. El rojo embiste mi centro. Mi alegría. Mi furia. Toros y sangre. Eso es la cuarentena; un toro bravío, y una mujer desnuda. Una disputa imposible y despareja. Es viernes y mis impolutas uñas se teñirán de rojo como las de Marilyn; salvándome -tal vez- de la inminente oscuridad que masculla gritos en calles vacías y sepulcrales. Rompo el silencio. La pausa global que nos encierra se quiebra, y se abre una grieta; procedo al ritual. Esmalte, manos vírgenes, y una batalla en guardia.

¡Por fin pillaste tu rojo, el rojo más puto posible! Dice Magela, feliz, en un recuerdo anclado antes de la cuarentena. Habíamos quedado en ir de compras, y buscarlo hasta pillarlo; pero no la veo hace tanto que sus ojos se diluyen en mi memoria. Me queda su voz tintineante. Todavía no me quitaron la memoria; aunque las certezas me las cepillaron hace rato.

Vuelvo al esmalte. Un rojo profundo tiende un puente imposible entre mis caderas, y mis razones cartesianas. Yo trepada al rojo. Tras pasar la segunda capa, tacos imaginarios y briosos se suben a mi cuerpo enclenque; nuevos precipicios, placeres, y secretos.

¿Y, ahora a quién putas le mostrarás esas uñas rojas en pleno luto pandémico? Esa pregunta inoportuna me lleva directo al baño donde hay un espejo de cuerpo entero. Desde su encierro, patricia -con minúsculas- me mira. Ella -dormida en cuarentena- me mira cauta desde el espejo de mis miedos.

Reímos. La cuarentena desaparece. Nos vamos a dormir -no sé si salvas- pero indómitas. Empieza el desacato.

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