Eliana Suárez
Súplica
Para B.
¿Y qué es el cabello de mujer
ante el espléndido manantial de la vida?
Un detalle trivial,
la inútil sonrisa de la burla,
ondas en colores de noche, de tierra, de trigal o de rubí…
Detalle que sólo vale para quien sólo ve
pero no siente.
Un cuerpo de mujer como río que serpea la llanura
como vertiente que suplicante:
nace en un grito, allá en la montaña.
Cuerpo solo descifrado por quien en verdad ama.
Cobijo de la esencia, escarcha de la savia,
haz de volverte mío porque nuestro ya fue.
Cuerpo, gacela herida,
tesoro que se ha derramado en el camino.
Bastión de guerra que se inicia cuando el sol,
cenital de olvidos,
impacta sobre un casco y un yelmo sombrío.
Cuerpo, amor eterno, muralla del silencio,
haz un hueco en el que renazca la fuerza.
Enraízate de mañanas y esperanzas,
de rosa luna, en este sur crucificado.
Muere a la lascivia y hazte héroe de la existencia
Pelea como la simiente en el surco,
cosecha nueva piel para los huesos.
Esa que era y ya no soy, sonríe,
ahora que brillo en esta guerra de múltiples frentes.
Sé, cuerpo, la frontera que me salva
y el dulce remanso que estruja esta alma.
Sé, cuerpo, la fuente donde brote el milagro
y nazca, tras la noche, lo deseado,
lo posible, lo que he suplicado.
(2022)
