Ya no basta
Que un vistazo ya no basta
Que los dos cuadros colgados junto mi pizarra ya no alcanzan
Que el final de esa historia se perdio entre las páginas arrancadas
Que la humedad se filtra en las paredes mal pintadas
Por que hace tiempo que vengo evadiendo el silencio de mi cuarto a oscuras
La distracción es tan adictiva como el dolor
Y éste vino, tantas películas, tu voz, las personas y sus formas de vida, tu risa, como Tinder me ayuda a olvidar lo mucho que te amo y lo poco que tengo para ofrecerte
Te vas disolviendo despacio en el vaso
Y el silencio de mi cuarto a oscuras reclama explicaciones que ya no tengo
Por que cierro los ojos y ya no siento
Y estar durmiendo todo el tiempo me ha hecho odiar a quienes quieren permanecer despiertos
Déjame hechar un vistazo más a todo lo que dejé enterrado
Un ataúd mal cerrado
Alquitrán inundando mi boca abierta
Lombrices de tierra
Hacen mi muerte más útil que mi vida entera
Que un vistazo ya no basta
Ni escribir de emociones vanas, de relaciones cortas y esporádicas, creyendo amar cuando todo lo que hice fue tocar la fachada de tu casa con la puerta cerrada, ni siquiera me animé a tocar el timbre…ya estabas acompañada
Ya ni siquiera quiero volver a mi casa
De pie frente a la reja con mi llave en la mano izquierda y un pseudopoema en la derecha
No quiero entrar, no quiero
Como cuando despierto y me rehúso a abrir los ojos por no despedirme de ese sueño
en el que yo era feliz con ellos
Me veo a lo lejos con ojos entreabiertos
Y te veo a vos de cerca, en silencio y te abrazo y te amo, pero no te quiero
Te amo pero no te quiero
No quiero entrar, no quiero volver a bajar
Déjame flotar y que las olas se encarguen de llevarme a cualquier lugar menos a esa silenciosa,
fría y cómoda oscuridad
No quiero entrar…tengo miedo de que ésta vez ya no me deje salir a jugar.
Neón
… fueron las luces de neón
Mi cuarto rojo y frío
Y vos que llegaste pidiendo calor
El humo bailando lento con el viento
Los espectros de luz en las paredes y el techo
Fueron mis ganas de escapar de éste laberinto que algunos llaman libertad
Fueron tus ojos negros y coquetos
tus ojos
Yo quería probar lo que se sentía tener un hogar
Vos querías olvidar el tuyo
Fueron mis ganas de sangrar
Tu capacidad de manipular los pensamientos y las emociones de los demás
Mi gusto por el cinísmo y la manipulación
Mis ganas de cuidarte
Tu maña de aferrarte
Tus manos
Tu fobia a dormir sola en esa casa enorme y llena de historia
Sola en esa cama sin memoria
Tus dedos
La determinación de superar mi adicción a la soledad
Tu piel y sus tatuajes
Mis ideas
Tus palabras
Mis poemas
Tus cuentos
El intento desesperado de pertenecernos
Ahora míarame
No soy más que un pedazo de carne
Sangre
Escencia hecha materia creando consciencia
Células vivas palpitando energía
Corriendo de tu piel a la mía
Ahora Tocame
Solo soy un pedazo de carne.
Primer acto:
Arden mis ojos y caen las cenizas del reino que un día fue mi hogar
La casa construida sobre el cementerio de mis sueños
Arden mis ojos y con ellos todo lo que un día di por hecho
Lagrimeo, lágrimas de humo bailando lento con el viento
Segundo acto:
Me persigue la sombra de un fantasma disperso en el tiempo
Un alma en pena adicta al sabor de sus heridas abiertas
Y un montón de realidades alternas explotan en mi cabeza
Mientras baila acida mi lengua y gotea amarga mi garganta
Y habla la sombra del fantasma como el canto de las ballenas bajo el agua
Yo persigo hipnotizada la voz de mis instintos y se ríe Dionisio
Mientras fornica con todos mis demonios internos hasta quedarse dormido
Tercer acto:
Me presento
Aunque debo admitir que hasta el momento he fracasado en cada intento de conceptualizar éste caos que llevo adentro…soy un personaje sin libreto
Destiñendo en letras esparcidas el color de tu voz vino neón
Tu voz que viaja en olas de aire hasta toparse con mi cuerpo estremecido
Desde mi oído interno siento como hilos, tres gotas de vino tinto que se deslizan por mi oreja derecha, se escurren por mi cuello y se mezclan con el sudor de mi pecho
Una punta de grafito hirviendo entierra tu nombre en mi libro de los muertos
Desmenuzándote en mi cuaderno, tus palabras, tus conceptos, letra por letra, tus muecas, el tono pastel de tus poemas; te escribo y no sé si te quiero más o menos y tras cada verso
No quiero
Quererte más
Personificación del velo que cuelga entre mis ojos y los de Dios
Me encanta ver todo a través de tus pupilas llenas de purpurina
Cuando (d)escribís al mundo como lo ves, como lo cuestionas y te proyectas en él
Ay mujer
Te pareces a la palabra terciopelo
Capaz por eso la escribí sesenta y dos veces y media en mi cuaderno
Terciopelo
Terciopelo
Terciopelo color vino neón desteñido
Ya no te espero mi cielo, ya no espero a que amanezcas
Pues me enamoré de las estrellas, de la noche y su silencio, de la soledad, del pecado, del invierno
Y todo ese miedo me quema por dentro, arde y me quemo, lloro y me quemo, bailo, beso, tiro me río y me quemo…me he quemado tantas veces que me enamoré del fuego
Camino sin destino, pero avanzo
¿A dónde avanzo? ¿A dónde me llevarán mis pasos si no sé a dónde quiero llegar, donde quiero estar?
Sé de dónde vengo, madre, lo sé
De que me sirve ahora saber de dónde vengo si no tengo idea a donde voy le pregunte al viento
Y la muerte sonrió
Cansada de todas esas preguntas sin respuesta, dejé mi consciencia en alguna dimensión paralela, de esas a las que una escapa cuando quiere escapar de ésta nuestra realidad en la que nunca pudo pertenecer, dejé de flotar y me enterré
Pero hasta el día de hoy no le encuentro valor a mis palabras, no logran nada, solo describen una y otra vez la misma confusión que he tenido la vida entera, de distintas maneras, busco y rebusco sin saber que mierda estoy buscando
Lo único relevante que aprendí de todo esto es a no dejar ir esos pequeños momentos en que la ausencia del dolor le deja espacio al placer y a veces al amor, esos instantes fugaces que parecen eternos cuando una los recuerda para llenar el vacío que ya ni se digna en tocar la puerta, que se filtra por las paredes, carcome mi piel de madera y disuelve las quimeras en mi cabeza
que me arde
Y me quema
Biografía
Fernanda Araúz es estudiante de diseño y videografía, adicta a la filosofía; escribió desde niña por la mera necesidad de aclarar la enredadera de su consciencia, siempre sintió una atracción por el arte en todas sus formas, buscando maneras para expresarse experimentó con varias áreas, desde el barismo y la coctelería, pasando por la escultura, el diseño y ahora está ejerciendo en el área audiovisual, en abril del 2019 publicó un poemario ilustrado y participó en el proyecto de iberoamericana en Bolivia
