…Sol…
Cuando mi astro favorito vigilaba mi ventana, el miedo me cubría con el desamor de tus letras.
Mis ojos recordaban tus mínimos gestos y volvía a escuchar tu voz quejándote de un amor que no era el mío.
Me duele dejarte ir, más este dolor será la satisfacción de no verme sufrir por un holograma que llamé amor.
Te dejo ir, por amor a mi libertad de volar.
Te dejo ir, para que brilles con la luna que no sabes cómo llamar.
Te dejo ir, con la media sonrisa que oculta la verdad.
… Brindis…
Un eclipse fue el día en que decidí dejar de amarte, entre lágrimas y canciones el dolor se agudizó y me dejó sin aliento para seguir inventando una excusa que me haga ver lo mejor de ti; no tuve resistencia a la tristeza, me abrazó y acarició mis risos todo el día sin dejar de lamentarse. Pensé en una despedida llena de infinitos besos a la curva de tu cuello, mientras la tormenta de tu vida no calma y sigues amándola más que el día de sol. Cerrando los ojos imaginé tu imponente presencia que se asemeja a un león, que guarda los secretos de la vida y el dolor. Hombre hecho luz que no dejas que te amen por miedo a que lastimen una vez más con los colores de la oscuridad que son tu debilidad. No puedo desvanecer en este momento mis pensamientos más fieles a tu boca, ni tampoco el miedo que me invade a que tu respuesta sea un no. Volaré en otro cielo, con otro tono de azul, con otra forma de amor.
Un beso a la distancia y un brindis con los amigos, por tu nombre.
…Abril…
En este frío abril…
Prométeme que te cuidarás en la oscuridad.
Prométeme que no llorarás con mi canción.
Prométeme que no me olvidarás, aunque me lo merezca.
Prométeme que serán mujeres exquisitas las que besen tu almohada.
Prométeme que en los últimos tragos brindarás por mí.
Prométeme que me odiarás incluso cuando vuelvan a encontrarse nuestras miradas.
… Divorcio…
Tuvimos un romance de fantasía.
La decisión de ser uno parecía poesía.
Blanco era el vestido que llevé.
Mis lágrimas en el altar no las pude contener.
La fiesta terminó y junto a ella el amor.
Te fuiste y el daño se hizo dolor.
Tuve un amor que no duró.
La frescura de la edad no fue la mejor apuesta.
Me dejó sin aliento y sin respuestas.
Experiencia al caminar.
Tengo la certeza que volveré a amar.
12 años pasaron desde aquel SI.
2 veces cambié de estado civil.
No tuve mi cuento de hadas.
Y ahora soy divorciada.
Valiente dicen algunos y otros ríen con ironía.
Camino despacio mientras lleno mi vida de alegrías.
… Ernesto…
Fue un momento muy corto el verte, tu rostro delata un pequeño cansancio, un conflicto por arreglar, una sonrisa que sólo yo puedo robar.
Hablamos de un pasado que no queremos soltar, negociamos una aventura que nunca se podrá formalizar.
Las carcajadas invaden cuando te hablo de mis años, mientras yo amo los tuyos en exceso.
Nuestro lenguaje se basa a números y 2 letras, no culpo a mi imaginación que tortura con una lluvia de tenerte…
Biografía
Annetha Salazar, con 35 años; prepara un café batido en toda circunstancia.
Es una aprendiz de las letras, sombra de tantos maestros que admira. Para ella escribir es más que crear, es su razón para ser feliz, escribe para su alma, que alimenta con letras, amor, ilusiones, perdón y libertad. Gusta de diferentes géneros, cree firmemente que en cada libro hay un mensaje oculto único que puede salvar tu día o tu vida.
Entre lo que escribe son poemas y cuentos cortos con muchos mensajes que cada lector identificará o tal vez odiará. Los podemos leer en sus Redes Sociales como Facebook, Wattpad, Instagram, Tumblr y otros más.
Su felicidad es gracias a la locura que habita dentro de ella, ocurrencia de todos los días es regalar sonrisas y palabras de optimismo en tiempos de oscuridad.
