La revista Inmediaciones entrevistó a Lucía Carvalho, una de las jóvenes poetas bolivianas con mayor proyección internacional, acaba de ser incluida en una antología de poesía argentina/boliviana que se presentó el 27 de diciembre, en Córdova, argentina en la que también se incluye poemas de Magela Baudoin.
Con esta entrevista nos acercamos más a la escritora boliviana, quien habla de su obra, sus proyectos y su metódica forma de trabajo.
P: ¿Cuántos libros tienes publicados a la fecha y en cuántas antologías estás incluida?
He publicado los libros Fiesta Equivocada en su primera edición por la editorial Torre de Papel (2017) y en su edición argentina por Santos Locos (2021), Universo 127 en su primera edición por YerbaMala Cartonera (2019) y su versión expandida digital por Bolivian Digital Publishing (2022) y la versión impresa por Electrodependiente (2023) y Oráculo eléctrico en su primera edición por Editorial 3600 (2023) y la segunda edición por Ascendente (2024). También he autopublicado las fanzines Hija del Internet (2019) y Paisajes emocionales (2021). Mi obra se encuentra en las antologías Desobediencia, antología de ensayo feminista (Dum Dum Editora, 2019). Pedir un deseo, prenderle fuego: poesía contemporánea latinoamericana (Ediciones Continente, 2020). 19 cuentos de terror (Parc Editores, 2022). Sub-35 Narrativas emergentes (Editorial 3600, 2022). Lugares comunes (Diccionario de escritoras, 2024). Entre otras antologías de festivales de poesía.
P: Cuéntanos de tu experiencia en Rosario, Argentina
Fue una experiencia que marcó un antes y después en mi poesía. Primero, porque fue el empujón de validación que creo que todo autor joven necesita, segundo porque descubrí otra poesía posible, otra forma de escribirla y leerla y por último las amistades que hicimos, conocí chicas y chicos muy talentosos con los que hasta ahora nos une no sólo la poesía sino la amistad y eso es un regalo muy lindo que también te da el arte.
P: Háblanos de tus influencias o referencias literarias y de algunos Poetas de tu generación
Mi influencia directa es Hilda Mundy, es a ella a quien siempre vuelvo. Las referencias van cambiando de acuerdo a la búsqueda en la que me encuentre. En estos momentos, Mariana Enríquez, Kafka, Mary Oliver, Anne Carson, Silvina Ocampo, Leonora Carrington y María Virginia Estenssoro. Poetas de mi generación, Joan Villanueva, Marcia Mendieta, Graciela González, Mariana Ríos, Leni Flores, Giovanni Bello, Fiorella Terrazas, Valeria Mussio, para nombrar algunos.
P: Sabemos que ganaste algunos premios, ¿cuáles y qué significa un premio para ti?
Los premios que obtuve fueron un impulso y motivación para continuar publicando, me abrieron muchas puertas y por eso siempre estaré agradecida.
P: ¿Qué te llevó a explorar el formato del videopoema? ¿Qué crees que aporta visualmente a la poesía que no se logra solo con palabras?
El audiovisual siempre ha sido una de mis pasiones y combinarla con la poesía surgió de forma muy orgánica. La videopoesía expande el poema y esa posibilidad es la que me fascina.
P: ¿Qué rol juega la experimentación en tu trabajo? ¿Cómo equilibras la creatividad visual y literaria en tus proyectos?
Me encuentro en una búsqueda de transferir esa visualidad a mis textos, intento crear texturas visuales y sonoras en mis poemas.
P: ¿Qué temas son los más recurrentes en tu obra? ¿Hay alguno que te haya resultado especialmente difícil de abordar?
Los temas recurrentes en mi obra son los relacionados con la tecnología y su efecto en el cuerpo y la mente. Los límites de la máquina y lo humano. Todo eso atravesado siempre por existencialismo, amor, desamor y un intento de descubrimiento personal.
P: ¿Cómo manejas la interacción con el público en plataformas digitales?
Tuve momentos en los que disfrutaba interactuar con desconocidos en internet pero ahora no me interesa. Es lindo cuando alguien me escribe sobre algo mío que leyó y le conmovió, las críticas me encantan, incluso disfruto las críticas malas, pero no me agrada estar tan expuesta al público, prefiero no hacerlo.
P: ¿Cómo surge la inspiración para tus obras? ¿Tienes algún ritual o método para escribir?
El método o ritual es definido por el proyecto que escribo. Algunos han surgido de una manera muy espontánea y otros he tenido que ser más metódica, pero en general la música que escucho de fondo es esencial.
P: ¿Cómo definirías tu estilo o tu identidad como escritora y artista multidisciplinaria?
Me parece imposible definirme a mí misma, creo que esa definición la hace cada lector.
P:¿Qué papel juega la vulnerabilidad en tu obra? ¿Qué tan difícil es exponerla en el contexto artístico?
La poesía es vulnerabilidad y por el momento es lo que más he publicado, así que estoy acostumbrada. Cada poema que escribo es una exposición de mis vulnerabilidades.
P: Si pudieras hablar con una joven poeta del pasado, ¿Qué le preguntarías o qué consejo le darías?
Que lea mucho más, siempre se puede leer más.
P: Casa Carmencita, tu sueño, tu centro cultural, explícanos su nacimiento, su desarrollo en estos años, algunos eventos canónicos, su importancia en una ciudad como santa Cruz de la Sierra y ¿por qué se está cerrando?
Casa Carmencita surgió con dos deseos, mantener el legado de mi abuela y el de aportar con un espacio cultural accesible. Ambos deseos se cumplieron y podemos decir que Casa Carmencita se ganó un lugar en el corazón de los jóvenes artistas, pues encontraron una plataforma en la que iniciar sus proyectos culturales. Han sido dos años de mucho aprendizaje y de conocer a gente muy linda y talentosa. Ahora nos damos un descanso temporal de las actividades al público debido a que me voy del país.
P: Tus lectores quieren saber de tu profesión y tu trabajo
Mi profesión es la publicidad, trabajé más de diez años en ese rubro, pero en el último año decidí enfocarme en la docencia y tuve la fortuna de ser profesora de literatura de estudiantes de secundaria, una experiencia hermosa que espero continuarla.
P: Planes de vida y de literatura para el 2025
Tengo algunos proyectos literarios, traducciones y nuevos libros que espero seguir trabajándolos el próximo año.