“El día de hoy, la Agencia de Protección Ambiental de los Estados Unidos (EPA) está dando un paso importante en su trabajo de revisión del glifosato. Como parte de esta acción, la EPA confirma que no hay riesgos para la salud pública cuando se usa el glifosato de acuerdo a su etiqueta actual, y que el glifosato no es carcinógeno. Los hallazgos científicos de la Agencia sobre el riesgo para la salud humana son consistentes con las conclusiones de las revisiones científicas realizadas por muchos otros países y otras Agencias federales…”, rezaba el Comunicado de Prensa emitido por la entidad gubernamental estadounidense (“EPA Takes Next Step in Review Process for Herbicide Glyphosate, Reaffirms No Risk to Public Health”, www.epa.gov, 30.ABR.2019).
«Si vamos a tener que alimentar a 10 mil millones de personas en 2050, vamos a necesitar todas las herramientas a nuestra disposición, lo que incluye el uso del glifosato», dijo el Secretario de Agricultura de los Estados Unidos (USDA), Sonny Perdue (…) «USDA aplaude la decisión de registro propuesta por la EPA, ya que se basa en la ciencia y es consistente con los hallazgos de otras autoridades reguladoras de que el glifosato no representa un riesgo carcinogénico para los humanos» -decía el Comunicado- indicando además que “el glifosato es el herbicida más utilizado en la agricultura de los EEUU y se lo ha estudiado por décadas. El glifosato se usa en más de 100 cultivos alimenticios resistentes al glifosato, incluidos el maíz, la soja, el algodón, la canola y la remolacha azucarera…”.
Importante la aclaración en momentos en que hay varios juicios al respecto, dos de ellos ganados…¿sabe por qué? Porque el tema es tratado por jueces y abogados, y no por científicos. Como los abogados saben de su oficio arguyen que “no se informó suficientemente sobre su toxicidad” y entonces ganan, no porque el glifosato sea malo sino porque su indebido uso habría enfermado a sus clientes.
Como explica la Ingeniera Biotecnóloga Ambiental, Cecilia González, “la decisión del juez no se fundamenta necesariamente en la prueba científica, menos cuando hay un jurado compuesto por gente que no comprende sobre toxicidad, epidemiología o incluso agricultura”, habida cuenta que «todo es tóxico, todo depende de la dosis» de ahí que cualquier exceso hace daño: el café, la carne…¡hasta el agua!
Cuando el glifosato se utiliza adecuadamente no hay riesgo de salud; el intríngulis se da cuando -por intereses- se confunde a la gente, incluso a jueces…
Gary Antonio Rodríguez Álvarez es Economista y Magíster en Comercio Internacional