Ante la crisis política y social que se desató a finales del 2019, luego de la denuncia del supuesto fraude electoral apoyada por la OEA, la renuncia del expresidente Evo Morales, los cruentos crímenes y violación a los derechos humanos en Sacaba, Senkata, Huayculi, Montero, Vila Vila, Pedregal, La Paz, entre otros, y la denuncia del envió de armas y el golpe de Estado, es fundamental contar con una investigación imparcial del Órgano Judicial que recopile elementos de convicción que conduzcan a la verdad de los hechos.
Sin embargo, también se requiere tender puentes y abrir espacios para pensar en propuestas que contribuyan a dar soluciones ante temas pendientes y superar la polarización para fortalecer la democracia en el país, mediante el diálogo y la reconciliación en función de reimaginar una Bolivia para todos y todas.
El mes pasado se realizó el “Seminario Internacional de Experiencias para el Reencuentro” organizado por la Vicepresidencia del Estado y el Sistema de Naciones Unidas en Bolivia. El evento contó con la participación de expert@s internacionales y nacionales, quienes compartieron sus experiencias en procesos de conflicto y diálogo. Así mismo participaron personalidades como Rigoberta Menchú, Premio Nobel de la Paz y cerca de un centenar de participantes de diversos sectores de la sociedad civil y actor@s políticos que hicieron propuestas para un reencuentro nacional. Como resultado del diálogo se identificaron tres aspectos fundamentales: voluntad política del oficialismo y la oposición, una agenda inclusiva y participativa y la promoción de un ambiente propicio para el reencuentro. A lo largo del seminario también se reflexionó sobre la importancia de establecer un contexto favorable para el diálogo, desactivando los discursos polarizantes, y dar más espacio a las voces que buscan construir y alcanzar equilibrios.
Como en otras ocasiones donde existen conflictos es necesario abrir espacios de diálogo para debatir y contribuir sobre temas claves, hacer propuestas y buscar la unidad más allá de las diferencias por el bien común. Es urgente elaborar propuestas temáticas ante los nuevos desafíos para dar respuestas a la crisis económica, política y social ahondada por la pandemia que sigue afectando nuestras vidas.
Así mismo, en el evento mencionado se propuso organizar e instalar mesas de diálogo y reconciliación intercultural a nivel departamental y nacional para analizar temas relacionados a fortalecer la democracia, incidir en políticas públicas en base al análisis y consenso, donde participen actor@s de diferentes organizaciones políticas, de la sociedad civil, la academia y el sector privado, cuyas conclusiones sean sistematizadas y entregadas al gobierno. Entre algunos de los temas claves se encuentran: la transparencia, lucha contra la corrupción y gobierno electrónico; reforma del sistema de justicia, democracia y separación de poderes; derechos humanos y garantías; reactivación económica y desarrollo, tomando en cuenta los derechos de la madre tierra; relaciones internacionales, financiamiento externo y articulación con la economía a nivel internacional; educación y fortalecimiento de capacidades esenciales en tiempos de pandemia; fomento a una cultura inclusiva, de paz y respeto en el marco del Estado Plurinacional, para superar el racismo, la discriminación, la xenofobia y el machismo; medidas para fortalecer el sistema de salud en general y para lucha contra el covid; igualdad de género, prevención y lucha contra todas las formas de violencia contra mujeres y niñas; y el rol de los medios de comunicación, las redes sociales y la libertad de expresión.
Es de esperar que se abran estos espacios de diálogo para reconstituir el tejido social, se fortalezca la democracia y se dé el reencuentro de los y las bolivianas más allá de nuestras diferencias por el país que merecemos vivir.
Elizabeth Salguero Carrillo es comunicadora social