La Cámara Regional de Despachantes de Aduana de Santa Cruz de la Sierra (CRDA-SC), suscribió un convenio con el Instituto Oncológico del Oriente Boliviano y la Fundación de Damas Argentinas (FADA), para la donación anual de 10.000 dólares americanos destinados a la compra de insumos médicos para menores con cáncer. El presidente de la CRDA-SC, Antonio Rocha, explicó que el acuerdo, firmado el 6 de abril, responde a políticas de Responsabilidad Social Empresarial de los despachantes de aduana, quienes buscan aportar a la resolución de problemáticas de la sociedad cruceña.
La firma del convenio entre CRDA-SC, y la Fundación de Damas Argentinas se realizó el 6 de abril, en instalaciones del Oncológico, como parte del programa de Responsabilidad Social Empresarial de la CRDA-SC y en el marco de la campaña de FADA denominada “Pro Catéteres”, siendo el principal objetivo de esta cruzada el beneficiar a niños que padecen de cáncer y que son de familias de escasos recursos.
Fortaleciendo una participación activa
“Desde la CRDA-SC decidimos implementar una participación más activa de ayuda a la comunidad para este año y proveer a los sectores más vulnerables de la población de los recursos que más necesitan para paliar sus necesidades. La Fundación de Damas Argentinas es una de las asociaciones que más tiempo lleva trabajando en esta área, ellas identificarán las necesidades y los beneficiarios mientas que nosotros apoyamos con los recursos para llegar mejor y a más personas”, aseguró Rocha.
Hacen falta los voluntarios
La Directora Ejecutiva del Instituto Oncológico del Oriente Boliviano, Dra. Martha Alicia Arrien, destacó los beneficios que su institución brinda a la población en la lucha contra el cáncer, siendo este centro médico el primero en contar con un Acelerador Lineal. Sin embargo, pese a los avances, dijo que aún hay mucho por hacer y que los aportes voluntarios como el realizado por la CRDA-SC son vitales para llegar con salud a más personas. “Siempre los voluntariados y las ayudas son necesarios, porque en ninguna parte del mundo el dinero alcanza para atender a los necesitados”, indicó.
Los recursos se destinarán a la adquisición de catéteres u otros insumos, de alta necesidad, para los tratamientos de quimioterapia de los menores con cáncer del Oncológico. Los catéteres son tubos plásticos pequeños que se insertan en la vena del paciente con la finalidad de facilitar la inyección de medicamentos, tomando en cuenta que estos dispositivos utilizados en el tratamiento del cáncer tienen una vida útil de hasta 2.500 pinchazos, al portarlo, es posible que un menor reciba su tratamiento y evite el dolor de las inyecciones hasta por dos años. Actualmente hay más de 400 niños que llevan adelante sus controles en el Instituto Oncológico y más de 270 que asisten a hacer sus tratamientos. Se presentan entre 90 a 100 casos nuevos cada año.