V o t o s
Laura Nicastro – Argentina
La pareja llegó al cocktail.
– A mi diestra, mi esposa –la presentó el hombre en voz alta, mientras levantaba la muñeca derecha unida por una cadena a la muñeca izquierda de la mujer.
La espera
Fabiola Morales Gasca – México
Tras la espera inútil del amor eterno, aquel día de primavera se decidió. Entró al local después de correr la delgada cortina azul, vio a las mujeres. Jóvenes, viejas, unas casi niñas, unas casi abuelas. Se sorprendió. Nunca imaginó tanta mujer ofreciendo su flor húmeda o marchita al mejor postor. Omar cerró los ojos y eligió al azar, daba igual, sólo quería conversar con alguna de ellas. A su edad, sólo recostarse en los brazos de una mujer era más que suficiente.
La brevedad del mundo
Estéfani Huiza Fernández – Bolivia
Me contaron, hace tiempo, que entre el cielo y la tierra dista sólo un breve espacio, que se hace lejano sólo por pensar que jamás podremos alcanzarlo. Si eso es cierto, quizá no somos nada en este pequeño mundo que nos regala vida.
Destino
Nélida Cañas – Argentina
Por las noches ella sueña los valles, los ríos y los senderos. Él recorre los valles. Cruza los ríos y camina por los senderos. Ni ella cesará en sus sueños ni él en su travesía hasta llegar a los brazos del otro.
El gol invisible
Jorge Larrea Mendieta – Bolivia
Jugaban en la calle, sin arcos ni reglas. Él pateó con fuerza, y todos gritaron “¡gol!”. Pero la pelota nunca entró. Solo rodó hasta sus pies. Y él volvió a patear.