En política solo la objetividad del análisis te puede conducir por el sendero del éxito.
Indudablemente la figura de Evo Morales es, para bien o para mal, la más importante de la política boliviana.
Fenómeno que se debe no solo al rol que el jefe del MAS ha tenido en la última etapa de nuestra historia, al ser el primer presidente indígena, al haber sido el presidente que más tiempo gobernó de manera continua y al encabezar un proceso político que, con luces y sombras, cambió el rostro del país; sino a que el líder cocalero encarna, todavía, las aspiraciones de un gran sector de nuestra población. Eso hace que siga teniendo vigencia política y que su accionar despierte tanta controversia en favor y en contra.
Si Evo no tendría posibilidades políticas de retorno al poder, nadie lo tomaría en cuenta. Ocurriría lo que pasa con dirigentes de la oposición que por más de 20 años vienen haciendo política y que ni pinchan ni cortan.
Pero Evo es un animal político, peligroso y agresivo. Le ha generado al presidente Arce la mayor inestabilidad de gobernabilidad al quitarle su apoyo parlamentario que ha obligado al presidente Arce, preocupado por el tema económico, tener que basar su gobernabilidad en los vocales del TCP, según la estrategia del ministro Lima. Evidentemente Lima es un principiante en política con respecto a Evo, al pensar que lo jurídico proscribe lo político, Evo es el centro de la política. La propia oposición no tendría la fuerza que tiene hoy si Morales no fuera parte implícita del bloque parlamentario opositor CC, Creemos y el MAS. A esta situación se suma la capacidad que tiene Evo de movilización en las calles. Es difícil imaginar la convocatoria a las elecciones judiciales solo con la ofensiva parlamentaria de la oposición, tal ofensiva habría sido insuficiente sin los bloqueos del evismo.
Esa es la actual ventaja de Evo en política que al margen de tener brigada, tiene calle.
Por eso, hoy desde el gobierno hasta los opositores, aliados coyunturales del evismo, coinciden que políticamente hay que matar a Evo.
Mientras que Arce quiere instalar en la sociedad el criterio que es la única alternativa de parar a Evo el 2025 y repetir la vieja fórmula del mal menor que Filemón Escobar desarrolló en el pasado cuando dijo que era mejor votar por Víctor Paz que por Banzer, porque el jefe del M.N.R era el mal menor. Hoy el presidente Arce quiere convertirse ante sectores anti evistas de la clase media como el mal menor que es preferible al retorno de Evo Morales al poder.
Por su parte, Evo rescata que en su gestión se estuvo mejor que ahora. Discurso que está calando en sectores de clase media, incluso en grupos del empresariado crucero,que con Evo ganaron mucho dinero.
Pero al margen de lo político Evo tiene rasgos personales particulares.
Evo viene de la conducción sindical que tiene subordinación al máximo dirigente.
Evo fue el presidente con más poder personal en nuestra historia.
Ni siquiera el Doctor Paz tuvo tanto poder en la época de gloria del M.N.R
Víctor Paz era el jefe indiscutido del M.N.R., pero tenía en la plana mayo de su partido primus inter pares como Siles, Zuazo Guevara, Lechín, Montenegro o Céspedes que podían hablar con el «jefe» de igual a igual.
Dentro el M.A.S jamás existió ello. Evo desde el nacimiento del M.A.S – IPSP concentro en su figura todo el poder sin rival al frente.(tal vez Santos Ramírez, en algún momento, podía discutir sus órdenes), Eso.llevo a qué su liderato tenga tintes de autoritarismo intolerancia y maltrato a dirigentes de su partido.
Contaré algunas anécdotas que lo describen de carne y hueso.
Uno de los ex edecanes de Evo me narro que en cierta ocasión Héctor Arce Zaconeta, entonces presidente de diputados tenía que entregarle un trabajo a Evo, el entonces presidente esperaba el ascensor. Arce llegó ante su jefe con cinco folders llenos de papeles. Al ver tanto papel Evo exclamó: «Oye cojudo te pedí una ayuda memoria «, y tiro los folders al suelo. El entonces
presidente de diputados no supo que hacer.
Cuando Coca era ministro de la presidencia llevó al gabinete unos souvenirs con la foto de Evo, el caudillo exclamó: «Éste es ministro, miren como trabaja». Todos quedaron en silencio.
En otra ocasión dijo en Gabinete que Aruquipa era el mejor gerente de YPFB porque se subía a controlar a los camiones que repartían gas licuado. Y esa fue una actitud permanente en él.
De ahí nace el: «métele no más! los abogados van arreglar».
En esa conducta egocéntrica se comprende el amarra guatos militar.
También está su célebre frase: «Lindo había sido ser presidente!»
La propia Gabriela Montaño confesó que muchos dirigentes del M.A.S después del 21 F estaban en desacuerdo que Evo vaya a la reelección, pero se callaron por temor a la irá del «jefazo».
Estos aspectos de la personalidad de Evo no ha cambiado, por el contrario, se han incrementado Ahora todo el que está es su contra es traidor al «proceso de cambio».
Eva Copa ha dicho: «Si Evo vuelve nos mete a todos presos.
Lo mismo debe pasar por la cabeza de Luis Arce .Sabe que si Evo vuelve al poder lo meterá preso de entrada, por eso su pelea es tan dura.
Evo siente que le ha » regalado» la presidencia a Luis Arce. Le exaspera ver qué el presidente tenga vuelo propio y quiera reelegirse el 2025. Entones lo tiene en la mira.
Lo propio ocurre ahora con García Linera.
Evo le mando el siguiente mensaje a Linera:
Así que ahora soy un indio viejo, no profesional, que debo dar paso a Andrónico. Tú tampoco eres profesional, te saqué del anonimato, te dí poder, te volviste un pequeño burgués económicamente pudiente. Durante 16 años estuviste lamiendo mis zapatos y hoy, como Judas me niegas. Entonces eres mi enemigo y cuídate!
Es que en política para Evo estás con él, o contra él. No hay término medio.
En Evo sus odios son más fuertes que sus amores.