Gualberto Lizárraga Ferrel
- Punto de partida
A través de este ensayo, se pretende enfocar las nuevas dimensiones de las relaciones sociales, las modalidades del uso cibernético para las comunicaciones y formas de producción y educación que sufrirán los seres humanos en la sociedad, a partir de la pandemia del coronavirus a la que hoy se trata de encarar bajo la llamada de aislamiento social en su fase experimental y medida de prevención a las afeccionas del virus.
La población en su conjunto están siendo aislados a una especie de ostracismo en sus viviendas, sin importar el tipo de viviendas en las que habitan, donde es de imaginarse que, aquellos sin casa propia, inmersos en diferentes condiciones de vida (hacinación) y con necesidades crecientes e insatisfechas, son víctimas de cualquier acto perverso para acceder a pingues remuneraciones en la intencionalidad del experimento letal, cuando les ofrecen o inducen a cometer actos delictivos sin importarles a los que son usados si son o no son delitos, con tal de cumplir la misión para el que se les compromete.
Para la ciencia sociológica, esta pandemia constituye un laboratorio de estudio e investigación, sobre las diversas manifestaciones que se producirán en el seno familiar, se da énfasis informativo en los medios de comunicación social a los actos de feminicidio, infanticidio, violaciones, estupro, desobediencia, vulneración a los derechos humanos, cuyos resultados, siendo reales, distraen a la opinión pública de no prestar atención al trasfondo de lo que simboliza ahora la pandemia en cuestión y fuerza al cambio de actitudes en la población y las familias a aspirar aires de libertad, convivencia pacífica, conformismo y perdida de la capacidad creadora y creativa, para obligarse a sí mismos a salir con su capacidad organizada y organización responsable, a enfrentar seria y racionalmente esta pandemia o aquellas que emerjan para similares propósitos desde los laboratorios nucleares del desarrollo tecnológico y científico del futuro.
El mundo está enfrentado ante un virus letal de incalculables consecuencias en la vida del planeta, donde la naturaleza y el comportamiento humano se ven enfrentados ante la producción de un virus en laboratorio denominado coronavirus (COVID-19), o al menos según teorías conspiracionistas, si fuera este su origen, aunque según opinión de los expertos más bien se constituye en una mutación biológica, cuyos metas en todo caso, de uno u otro modo estarían dirigidos esencialmente a una guerra biológica sin derramamiento de sangre que, pueden derivar en reducir altos niveles de contaminación ambiental y de explosión demográfica, a costa de provocar muertes en quienes se infecten en su relación social por dicho virus y esto, como en un juego de domino, se incline para imponer condiciones al excesivo nivel de consumismo que derive en una crisis de sobreproducción y encarecimiento de productos ante las medidas preventivas que cada estado asuma para proteger la vida de los seres vivos, donde la producción artificial y transgénica sea la nueva modalidad alimenticia que la humanidad tenga que consumir, de modo que detrás de todo lo que representa la pandemia, se está ahorrando energía de diferente tipo a ser utilizado en la pos pandemia, sin ninguna resistencia con precios convenientes a las empresas distribuidoras e industrias bioquímico farmacéuticas, sanitarias y otros, de modo que así las potencias hegemónicas del mundo globalizado del capitalismo se mantenga sin visos de ser diferente, sino magnánimo con la naturaleza que podría reducir los altos niveles de bióxido de carbono por la alta tecnología productiva y sin muchas fuerzas productivas humanas a ser aplicado en los sectores productivos para el manejo de los recursos naturales, lo que conllevara menos asalariados, bajos salarios, menos horas de trabajo y mayor tiempo de ocio viviendo con subvenciones, obras de caridad, campañas de ayuda al prójimo y otros que vivan de la mendicidad de los poderosos.
Es evidente que, en la historia, se produjeron muchas pandemias que provocaron más muertes que en la primera y segunda guerra mundial, pero no todos tuvieron los mismos efectos en la expansión de poder mundial como el que esta gestándose con la pandemia del coronavirus, en principio, tendiendo sobre Europa y Norte América el virus, proveniente del Asia, que por su deficiente sistema de salud tendrán mayor mortandad en África y Sudamérica, al menos hasta que en Europa o Norte América, descubran el antídoto que probablemente ya cuentan en el mundo Asiático y que no usan aun, en tanto logren las metas trazadas con la pandemia.
La vacuna contra el coronavirus, en opinión de expertos, demoraría entre uno a tres años, los costos que tendrán que pagar los países más afectados resultara en una mercancía cara que enriquecerá a quienes la descubran y pongan al servicio de la población mundial para su vacuna respectiva.
Por la experiencia de coronavirus, la humanidad tendrá que estar pendiente de que más adelante no produzcan otros virus más letales, para generar después de sus efectos, una ganancia archimillonaria para quienes tengan el antídoto que no sean los mismos creadores de los virus en laboratorios de alta sofisticación bioquímico y farmacéutico y de la tecnología sanitaria para su prevención y tratamiento de la industria sanitaria.
Bajo estos elementos señalados, y por los resultados de las experiencias en el mundo de la pandemia, veamos lo que se está haciendo en nuestro país, con grandes deficiencias sanitarias en infraestructura, recursos humanos, instrumentos y tecnología, medicación y todos los demás insumos requeridos para frenar el contagio creciente en la población, principalmente desobediente a las medidas de la cuarentena:
- El aislamiento social: quédese en casa
En el avance de la integración social en Bolivia, frente a la pandemia del coronavirus, de improviso nos vemos obligados al aislamiento social, como medida instintiva para proteger a los habitantes en el país, de no ser víctimas del contagio del virus, inicialmente proveniente de personas que ingresaron al país de otros países, nos tomó por sorpresa, no obstante que los medios de comunicación social, sobre todo las redes sociales, nos mostraban lo que sucedía en China, Iraq, Italia, España, Francia, Alemania, Gran Bretaña, Estados Unidos, Brasil, Argentina, otros países donde se concentra la mayor cantidad de población, y, casi coincidentemente, son los mayores atractores de turistas, se esperó en el país que sucediera lo que ahora nos mantiene en zozobra y mostrando a grupos humanos y familiares enfrentados a obedecer o negarse a acatar las medidas decretadas por el Órgano Ejecutivo, cada grupo tiene sus propios argumentos para asumir las actitudes que asumen, lo que nos hace ver cuanta ausencia de estudios se tiene sobre el comportamiento de los bolivianos frente a determinadas crisis económicas, social, sanitarias y la credibilidad que tienen sobre las diversas medidas que determinan los gobiernos y la ausencia de previsión ante probables fenómenos de desastre natural, crisis sanitaria, sistema educativo, cambio climático, otros aun no experimentados .
Es en estas circunstancias que se puede establecer con claridad hasta qué grado se da la internalización de las normas en la población, en qué nivel de cumplimiento de las leyes nos encontramos y cuál es el estado de conciencia que tenemos para enfrentar riesgos que atenten contra la especie humana, ante la creciente lucha por defender la naturaleza, las especies animales y vegetales, que tampoco damos cumplimiento a pesar de estar identificado con esos principios y valores conciénciales, ya que caemos en cuenta no estar preparados para cumplir y hacer cumplir políticas de protección de especies, defensa de la naturaleza, la salud y nutrición de la población así como la seguridad ciudadana.
Los mayores niveles de contagio se producen en donde hay mayor concentración de la población, es por ello que se prohíbe la realización de eventos deportivos, artísticos y educativos, así como recomendar el uso de guantes, barbijo, lavado de manos con jabón, uso de alcohol en gel, que son productos que repelen el virus, estas prácticas por lo común es de uso exclusivo de los médicos y enfermeras en las clínicas y hospitales, y a partir de la pandemia del coronavirus se está socializando el uso de estos insumos en toda la población que presenta cuadro de resfrío, gripe, tos, estornudo, tanto en la casa como al salir y entrar de la calle a hacer compras; desinfectar los alimentos y productos que adquieren, tanto en los que compran, y, con mayor razón, en los que venden o proveen.
Hay grupos humanos y familias que comprenden y acatan dichas recomendaciones, además que pueden acceder a estos insumos, otras no pueden y hay que facilitarles su acceso. Lo más irónico es que estos insumos de improviso han sufrido elevación de costos en las farmacias, hecho paradójico que, dichos negocios de similar manera que los comerciantes en los mercados, aprovechan para ganar más dinero a costa de la salud de la población, antes que permitir su acceso a precios menores en defensa de la salud humana, no existiendo ningún tipo de regulación o control de este sobreprecio por parte de instituciones del Estado, ni siquiera de la oficina de defensa del consumidor dependiente del ministerio de justicia.
Lo más práctico es que la población debía dotarse de insumos sanitarios a través de sus organizaciones barriales, sociales, institucionales, el Estado, mediante dichas instancias, debe facilitar su distribución bajo su supervisión; autorizar a los mercados y supermercados el aprovisionamiento de producto alimenticios con facturas o recibos que deben ser pagados al costo real por el estado antes que dar bonos que obligan salidas de miembros de las familias a realizar las compras y en ese proceso en donde el riesgo de infección del virus es más factible. Antes que la policía y las fuerzas armadas salgan a hacer cumplir la cuarentena, estos organizadamente y barrio por barrio, podían abastecer a la población con productos de la canasta familiar que debían estar a cargo de entregar casa por casa, con todas las normas sanitarias y cumpliendo todos los protocolos que eviten su contagio por ese servicio.
El verdadero servicio a la Patria es cumpliendo con el pueblo en momentos de crisis y más aun estando en guerra contra el COVID-19, debían procurar que en esta guerra todo ciudadano se alimenta, se equipa, se prepara y es parte de la guerra, los productos de la canasta familiar deben ser concentrados en las entidades tutelares y desde ellas, como se indica, hacer llegar a las familias y el estado pague al proveedor de acuerdo a los precios fijados en épocas de guerra y controlando estrictamente en épocas de paz los precios, para frenar el agio y la especulación y todos sufran y disfruten de esas circunstancias de crisis en similar proporción.
Así, entonces y solo entonces, vale la consigna Quédese en Casa, de otro modo, es un canto de pájaros que deleita, pero no alimenta el cuerpo y la razón, ni lucha contra el virus, solo se presta para negociar con la necesidad de la población encapsulada en época de guerra, que todo le cuesta cumplir y nada le vale la población al estado, cuando no cumple sus obligaciones.
- Cambio de actitudes en la población ante la pandemia
La hipocresía humana, en esta época plenamente institucionalizada por el vicio y la corrupción alienada a la acumulación egoísta, exige todo y poco da a sus semejantes, si antes no saca ventajas o beneficios pecuniarios para sí mismo. Este principio axiomático, que caracteriza al ser humano en el presente, obliga a los ciudadanos y sus instituciones a un cambio de actitudes y valores que le ennoblezcan de ser social e institucional, con capacidad de decidir y determinar su conciencia a las condiciones emergentes no previstas, sin necesariamente verse obligado o presionado a desprenderse de complejos y prejuicios que lo condenan en la tierra a vivir como bestia a muchas personas, actuar como entes a las entidades, antes que por compartir se diferencie de la bestia el ser humano y de cumplir roles acordes la realidad, para justificar su vigencia existan las instituciones.
La simple imaginación de saber que no estamos preparados para encarar en conjunto las diferentes fenómenos de salud, que la época de la globalización del gran capital ha dividido a los países que pretenden ser más y mejor potencia que otros, planifican nuevas métodos e instrumentos con que alcanzar ser superiores a sus afines en el mundo, para ello, y como teoría conspiracioncitas que quien sabe sea cierta, desde los laboratorios más complejos de la industria de la salud crean virus de diferente grado y característica letal como manifestación de estar en la punta del desarrollo científico y tecnológico, que antes que contribuir a preservar en mejores condiciones de vida y salud a la humanidad, atentan contra la naturaleza y la especie humana, creando armas mortales declarando guerra a la especie que ha dejado de considerarse parte de la naturaleza o de creación humana, en ambos casos, en su afán de mayor enriquecimiento, concentrando en pocos grupos familiares y-o institucionales que se proponen ejercer control al comportamiento político y conducta moral, según como requieren para seguir perpetuando un sistema u orden mundial que desde la especie humana y las organizaciones sociales y empresariales, retroalimenten la necesidad del consumismo excesivo evitando no deteriorar los recursos naturales, sino produciendo alimentos y productos de tipo transgénico, tecnología, conocimiento y conductas de dominación, entre otras formas de control social y de sometimiento del ser humano a lo que ha creado el mismo, desconociéndose a sí mismo, para endiosarlo y defenderlo como algo sustancial de su convivencia.
La nueva visión del control social y dominación cultural es amedrentar a la especie humana que ha atentado contra la naturaleza, despintando mediante las pandemias que no son las grandes industrias de la explotación de los recursos naturales no renovables, para que atenten su depredación de recursos naturales renovables que es la que mayor demanda tendrá de las empresas transnacionales en el sistema mundo de la competitividad, valiéndose de nuevas políticas no velicas sino biológicas, ya que han alcanzado los niveles más altos de producción bélica, que pueden derivar, mediante su uso, en la destrucción del planeta, aunque para contrarrestar esta especie de juicio final, se afanan en la conquista espacial a donde ir a colonizar en un futuro mediato haciendo un proceso selectivo de los humanoides que migren a otros planetas ya que para tanta sobre explosión demográfica en la tierra, no están todos en condiciones de ser trasplantados a esos nuevos mundos a explorar y explotar.
En el sistema mundo actual, la carrera de dominación es tan grande, que para vencer necesitan valerse de otros medios, como continuación de esas políticas por otros medios que son las guerras con pandemias en la tierra, interplanetarias y de crear nuevos valores para nuevas conductas que garanticen el éxito de este tipo de políticas de dominación hegemónica del planeta acelerando la lucha competitiva y apropiándose de los más eficaces métodos e instrumentos de guerra bacteriológica y termonuclear inventados y construidos. Cuando quede un único vencedor en esta lucha inter hegemónica del poder mundial, entonces ya no tendrán competidores que le impidan llegar a otros planetas a hegemonizar su poderío y prescindir de la especie humana en cantidad, haciéndola más cualitativo en el manejo de la biotecnología y el conocimiento robótico, para conquistar y preservar la vida en otros planetas y galaxias.
La cualificación de la especie humana de manera selectiva, tiene que hacerse en primera instancia en la tierra implementando nuevos sistemas educativos y de formación técnico científico, con métodos virtuales, las formas presenciales de trabajo y formación de recursos humanos, dejaran de ser, poco a poco, presenciales, llegara el tiempo en que los seres humanos dejaran aulas, textos físicos y docentes tradicionales, las relaciones sexuales ya se harán obsoletos para perpetuar la especie, será suficiente la inseminación artificial y hasta dejaran de mantenerse grupos familiares, ya que serán una especie de robots con formas humanas, de los más perfectos, estética y físicamente creados en laboratorio y con los tipos y características psicosomáticas más extravagantes, al gusto, necesidad y satisfacción de sus creadores.
Estaremos en esa carrera al que nos están induciendo aquellos intereses empresariales, tenemos conciencia de esa realidad y podemos dejarnos guiar tan sigilosamente, o, tendremos que cambiar el rumbo de ese proceso deshumanizador y de negación de la capacidad transformadora de la especie humana volviendo a reconocer que somos parte de la naturaleza que en tanto la detentamos nos estamos suicidando y mientras sepamos hacer un manejo racional, pudiéramos cambiar esa vía auto destructiva, robótica, viral y virtual absoluta.
- Políticas de estado ante la pandemia
El llamado gobierno constitucional de transición, esta forzada por las circunstancias especiales de la pandemia del COVID-19 a asumir responsabilidades en defensa de la población, que de ser afectada y sin ser detectada oportunamente de dicho contagio, puede expandir el virus en la sociedad a partir de un miembro a la familia y de estas al conjunto de la población boliviana. Para evitar o minimizar los riesgos, en un momento en que debía realizarse las elecciones nacionales, se ven entre la pandemia, las elecciones generales y el quebrantamiento del aparato productivo, donde los integrantes de las fábricas e industrias, aunque incipientes, están ante la disyuntiva de evitar el contagio y quedarse en casa, o; cumplir sus obligaciones de ir a su fuente de trabajo bajo el riesgo de contagiarse del virus que conlleva largo tiempo.
Ante este tipo de disyuntivas, tiene que ser el Órgano Ejecutivo del Estado, quien debe dar los lineamientos básicos del que hacer, ya que de no tomarse las medidas preventivas y tratativas, podría resultar ser la responsable de miles de vidas humanas, así mismo, por la declaratoria de cuarentena, estar liberada de las conjeturas de que la economía en recesión sea por culpa de la presidente, que ambas juntas, pondrían en peligro de quedarse sin población y sin ingresos económicos sin las cuales estaríamos a punto de quedaros como el país más quebrantado y en probabilidad de vivir de la ayuda o cooperación internacional, que a su vez están pasando por similar situación en otros países, sin los ingresos, ganancias y recursos suficientes para resolver sus efectos de la pandemia y a su vez solidarizarse con los bolivianos, que no habíamos logrado crear un sistema de salud integral y mucho menos prever este tipo de pandemias o desastres naturales.
La realidad sociopolítica en el país se caracteriza, en esta coyuntura, por dos grandes problemáticas, cuyo tratamiento apropiado deberá ser encontrada y propuesta por el próximo gobierno democrático que emerja de las próximas elecciones del 2020, mismo que tiene como principal tarea de su gestión ser concreto, objetivo y sin prejuicios de diferenciación con otras fuerzas, más por el contrario concertador en la aprobación y aplicación de las medidas que cada caso amerita con similar prioridad . Estas problemáticas son:
IV.1. Recesión económica
Hasta el 10 de noviembre del 2019, se había publicitado una bonanza económica, con los altos ingresos económicos por la venta y negociación del precio de los hidrocarburos, de las materias primas de exportación, captar gran masa de dinero por las remesas del exterior, la tributación y el blanqueo de dólares del narcotráfico, la estabilidad monetaria y otros aspectos de la macro y micro economía, al extremo que se hablaba de alrededor de 23 mil millones de reserva monetaria, para después de la renuncia y abandono del país por los gobernantes, también se supo de un endeudamiento cuantioso de cerca de 5 mil millones de dólares, así mismo de la existencia de una tasa de desempleo creciente, inversión en infraestructura vial, deportiva y de producción informados anualmente por el entonces presidente Evo Morales Ayma, mismos que en la realidad muestran un cuadro de malversación multimillonario por hechos de corrupción, inestabilidad laboral y bajos salarios, compensados por la creación de diferentes bonos paternalistas, todos estos aspectos encubiertos y en complicidad con los dirigentes de los movimientos sociales, entre las más lamentable con la dirigencia de la COB, que hoy reclaman derechos humanos para delinquir y perdonar delitos, demandar incremento salarial que no hicieron al gobierno masista, manifestarse, en entrevistas de candidatos del MAS, la persecución política del que son objeto sus cuadros, dirigentes o ex autoridades, atentado a la libertad y vulnerar derechos ciudadanos, cuando esto fue institucionalizado por el régimen del MAS con todos sus opositores de izquierda o derecha, que al final de cuentas resulto ser un gobierno de los ricos nuevos y tradicionales y enemigo de los más pobres y luchadores sociales.
En el presente se mantiene los Bonos y se crean otros, justificados por la crisis sanitaria agudizado por la pandemia del COVD-19, nada se ha modificado en términos de política de estado, apenas se ha cumplido la conformación del Tribunal Supremo Electoral del Órgano Electoral, se ha convocado a elecciones generales y diferido constantemente que prorroga al órgano ejecutivo merced a la pandemia que es racional la medida, sin embargo, el Órgano Legislativo, que nada tiene ya que hacer por carecer de moral, sigue tomando el mando de posponer o adelantar las elecciones, impide el procesamiento de ex autoridades y extraditar a Evo Morales, Álvaro García Linera y otros protegidos y mantenidos en Embajadas que no permiten su procesamiento por gozar del asilo político. Un hecho trascendental con el actual gobierno es que se mantiene al personal de servicio público en las entidades públicas, se empeña en ampliar el sistema de salud y poner a marchar el sistema sanitario en crisis a pasos forzados por los altos riesgos de contagio del virus.
Los contratos suscritos con Brasil y Argentina para la venta del gas a precios determinados por el mercado internacional, estaría obligando al gobierno de Añez a tomar medidas de reducir el número de personal en las entidades públicas, no incrementar sueldos y salarios demandados por el alza de precios en los productos de la canasta familiar de los trabajadores y empleados, incrementar el endeudamiento interno y externo para atender la pandemia y ciertas necesidades de la población, cierre de fronteras, paralizar el funcionamiento del parque automotor y reducir el flujo migratorio, frenar el turismo interno y externo, en definitiva paralizar las actividades que generan los ingresos económicos que se traducen en los ingresos, empleo y subvención de los hidrocarburos, que en esta coyuntura han bajado de precio internacional favorable para Bolivia, ¿por cuánto tiempo?.
IV.2. Crisis sanitaria
El sistema sanitario en Bolivia toca fondo, se descubre en su más bajo nivel de infraestructura, equipamiento, recursos humanos e insumos insuficientes, para la atención al público, sobrevivencia a su modo, en ese sentido, debido a la pandemia del coronavirus sabemos que es este uno de los sectores que menos atención recibió del gobierno anterior que en 14 años solo se mostro de buenas intenciones, fuerte para oponerse ante las demandas de los médicos, olvidando a los miles de pacientes habidos de ser atendidos, entercado y soberbio por no responder los colegios médicos directamente a sus directrices y la mediocridad de los ministros que se sucedieron en esta cartera de Estado, pero con el coraje de crear un sistema único de salud, sin viabilizar el presupuesto que contribuya a subsanar todas las deficiencias enunciadas, es todo cuanto hizo el MAS.
Según la CPE, la educación y la salud son una prioridad del Estado, sin embargo, ambos fueron el furgón de cola, no tanto por ser clamados en la CPE sino porque sus políticas sociales no siguieron consecuente con lo que proponían, ambos ministerios fueron muy funcionales a la generación de recursos por concepto de la legalización de títulos profesionales, sin las consiguientes facturaciones de ley, así cualquier ciudadano puede imaginarse que se convirtieron en máquinas de dar dinero para ser compartidos entre cuates del partido en ejercicio del poder absoluto del MAS. He ahí la clave y el secreto de porque se exigían para cualquier pega los Títulos en Provisión nacional, que ambos ministerios tenían esas facultades, el de salud y educación acrecentando la creación de Universidades privadas y servicios de salud privados. Además sin olvidar que en cuanto a la salud y en el marco constitucional art 37 se constituye en la prioridad financiera número 1, por lo cual el anterior como este gobierno ni siquiera en razón a ello hizo o hacen algo para su cumplimiento.
Las medidas de cuarentena, encapsulamiento o de toque de queda, para la población en sus casas, cumplidas en más del 80% de familias, evitaron la infección con el virus en las proporciones alarmante en otros países, pero ese 20% de incrédulos del virus y con una actitud terca ante decreto del gobierno de transición, podríamos decir, son la base del contagio por las relaciones de parentesco que mantienen, al no estar aislados o distanciados de aquellos en las calles bloqueando, agrediendo a personal de salud que se desplaza por las calles tratando de persuadir y mostrar los riesgos del contagio masivo.
Con base a la cantidad creciente de afectados en Santa Cruz, La Paz, Oruro, Beni, que al momento que se escribe este artículo, el país suma cerca de 1.000 afectados y un centenar de muertos, que de no acatar las medidas recomendadas por el Comité Científico podrían cuadruplicarse en menos de 2 semanas. De llegar a darse esta presunción, el país estaría frente a una pandemia cuya cuarentena por las insuficiencias sanitarias colapsarían y, si, estaríamos llorando no haber acatado en su momento las medidas y culpando a quien tampoco ha sido capaz de garantizar la infraestructura, el equipamiento, los recursos humanos apropiados y los insumos de salud requeridos para atender a los declarados con infección.
Debemos tomar en cuenta que el reclamo al gobierno por parte de la población en general y de los afectados en particular, estarían fundados en los montos de ayuda internacional, endeudamiento y donaciones que estarían alrededor de los 2 a 3 mil millones de dólares, aún no están siendo utilizados oportunamente para construir hospitales de tercer nivel, equipar clínicas y hospitales existentes; contratar personal de salud requeridos; realizar las diagnósticos de manera expedida; dotar de laboratorios de análisis adecuadamente equipados en cada municipio, abastecer de alimentos básicos a la población, dotar de equipos de bioseguridad en cantidad y calidad al personal sanitario, nos hacen pronosticas la gravedad del caso y el grado de amenaza a la vida de la población en su conjunto. Además sin describir mucho cuanto están lucrando los centros privados de salud que por razones incomprensibles a todo aquel que se apersona o acude para ser atendido por problemas quizá propio del covid-19 lo que hacen sin duda es lucrar antes que atender como a un verdadero ser humano, no pudiendo el Gobierno actuar con rigurosidad y empatía hacia el ser humano y como en España, Irlanda y Francia por ultimo nacionalizar de manera temporal la sanidad privada, ósea ni eso podemos hacer y si podemos viajar en aviones de las FAB, si podemos alegar ayuda humanitaria para asistir a cumpleaños de unos u otros, etc., etc., y como gran salida incluso pedir disculpas de esas aberraciones, es inaudito.
Afortunadamente, el gobierno tuvo a bien rodearse de un equipo técnico y científico muy competitivo, que con su asesoramiento ante la crisis sanitaria, han establecido evaluaciones de estado de situación del grado de infestación de la población cada semana, para permitir a que sean los Gobiernos municipales quienes decidan las medidas que vean convenientes para prevenir índices mayores de mortalidad por causa del virus, lo que obliga al gobierno a través del Ministerio de salud realizar el seguimiento a estas medidas, ampliando la dotación de mayor infraestructura sanitaria para atender a los infestados, equipamiento oportuno y apropiado de los hospitales existentes para su tratamiento oportuno, estudiar los sitios y modalidades donde serian enterrados los difuntos, regular los costos e imponer en esta guerra contra la pandemia lo que conviene al estado y a la población boliviana.
Desde el Ministerio de Salud debería ejercerse un control estricto a los precios de los insumos que las farmacias debe rain obligarse, fijando previamente dichos costos tomando en cuenta el nivel de vida e ingresos de la población en general y no lo que convenga a los mercaderes de la salud.
- Elecciones nacionales y la salud de la población
El cronograma electoral se desfasa cada día que pasa, en consecuencia, la realización de las elecciones generales en este año tiene la tendencia de ir postergándose, lo que desde el punto de vista de la política y los políticos va creando un ambiente de incredibilidad de su realización, infundiendo en la población el temor de quedar el país con un gobierno de transición, mientras dure la pandemia, donde el ahora partido político opositor y sus candidatos acusen, al gobierno de jeanine Añez Chávez, que en contraposición a la ultima ley para diferir las elecciones, le este permitiendo sacar ventaja electoral, y; de parte del gobierno, acusar al MAS y sus levanta manos, el de estar acelerando desde la Asamblea Plurinacional la realización en 90 días las elecciones, quizás, por interés de retorno al país del ex presidente en el exilio, cuya ausencia se constituye en el temor de los candidatos actuales de estar perdiendo un caudal electoral masivo, además de convertirse en los causantes de mayor infestación del virus en la población.
En verdad, la actitud política patriótica de los actuales partidos políticos y candidatos para terciar en las elecciones generales, deberían ser los llamados a establecer los acuerdos de unanimidad para enfrentar la guerra contra la pandemia del COVID-19, determinar las fechas de la realización de la misma, cuando previa y efectivamente se haya hecho retroceder el virus letal a los laboratorios más sofisticados del mundo y el país a encontrar la vacuna contra ella, asegurar que dicho acto plebiscitario ya no será postergado.
Los changuitos becados a China y los masistas en el poder salían a china y entraban a Bolivia como Pedro a su Casa, de similar modo los importadores, es más probable que ellos sepan cuanto tiempo durara la pandemia y es por eso que exigen pronta realización de las elecciones, intentan sabotear la cuarentena, se alistan para realizar actos delictivos como derecho humano mal concebido y todo cuanto les sea conveniente para mostrar que están vigentes aunque están cayéndose pedazo a pedazo.
El Candidato Carlos Mesa tomo una iniciativa política interesante, enviando una carta a la presidente Añez, a que se que convoque a una cumbre de partidos políticos, para determinar las acciones a seguir con miras a las elecciones generales y la guerra contra el COVID-19, al no responder favorablemente ni tomar esa sugerencia como una salida política de calidad, ante la desesperación de los parlamentarios masistas acostumbrados a actuar como rodillo, para querer mostrar al gobierno de transición de ser golpista, hacen gala de estar siguiendo las prácticas de sus antecesores soberbios y renegados, cuando las optimas propuestas provienen de otras personas u organizaciones y no de las suyas, esas prácticas prejuiciosas, aún perduran, así, cuidado, los de Juntos, caigan al precipicio de la ignominia popular, antes que enfilarse al entorno de los que piensan, aunque no actúan por creer en la cuarentena.
- CONCLUSIONES Y RECOMENDACIONES
- Revisado los estudios y análisis sobre el origen del COVID_19, lo más probable es que este es producto humano en laboratorio con fines de mantener a la humanidad en estado de indefensión para sacar de esto una paralización económica total en los Estados, sin embargo aún sea que la otra teoría se imponga cual es una mutación biológica, de todos modos los Estados deben hacer frente para luchar contra las desigualdades sociales, y promover políticas mucho mas alentadoras para no caer en miseria, mendicidades o finalmente en decadencia.
- Por fines estratégicos del Estado, se debiera actuar con rigurosidad e implacabilidad contra todo aquel que no se someta a las mismas reglas de confinamiento establecidas, incluso adoptando medidas como estado de excepción para precautelar los más altos intereses del país y por tal quienes incumplan se atengan a las consecuencias de ley
- De no promoverse este estado de confinamiento al menos 1 mes más, el resultado será conciencial y con costos aun muy por encima de lo que se pronostica, por tanto, el dar bonos o ayudas en 500 bs, profundizar las ayudas a las áreas más rurales o alejadas del país es tarea primordial del Estado y tratar de aguantar un tiempo más, es sin duda la mejor opción y no enfrentarnos a peores posibilidades si acaso continua el afán de no aceptar esta pandemia como cierta.
- En materia política, es prudente tomar con cautela lo que pueda hacerse para controlar la expansión del virus en la población y sean los partidos y candidatos participantes en las elecciones quienes tomen las decisiones por encima de una Asamblea Plurinacional que solo mira sus intereses de su partido y ni siquiera de su militancia.
- El gobierno debe acelerar la provisión y dotación de los insumos de la bioseguridad al personal médico y a quienes realizaran actividades de distribución de alimentos, insumos y traslado de enfermos a los centros establecidos, así como a difuntos para su sepultura, con todas las normas y protocolos de seguridad sanitaria.
- Los SEDES son los llamados a cumplir un rol determinante en este proceso de la pandemia, lo que significa que deben mantener informada a la población sobre el estado de los contagiados y su tratamiento, clasificando la información por sexo, edad, lugar, actividad u ocupación que cumplía el afectado, las circunstancias de su infección, las circunstancias de su detección, otros de interés sociológico.
- La pandemia no solo es asunto de los profesionales de la salud, en ello deberían estar activos otras disciplinas con sus especialistas que pueden contribuir a dar ideas, llevar adelante las propuestas nacionales y estar comprometidos desde el campo de su conocimiento y formación, esto conlleva a que sean parte del comité científico y los SEDES, asesorando, compatibilizando metodologías de acción y organización social, analizar la información evaluando resultados y metodologías de la pandemia.
