Jackeline Barriga Nava
La inspiración artística es un fenómeno cargado de incógnitas, muchos estudiosos sobre el tema tratan y trataron de explicarnos, por ese motivo existe variedad de teorías e hipótesis sustanciales según las variables escogidas por los investigadores para responder sus objetivos de estudio. En este caso explicaré distintos aportes sobre la inspiración artística desde la psicológica.
Inicialmente los hebreos definían que la inspiración del artista era recibir aliento, su origen surgía de algo divino -del aliento de un Dios-; los griegos definían como un estado de éxtasis, frenesí divino, una locura poética, controlados por las musas, las cuales soplaban, insuflaban a los artistas, entre las musas se destacaban las Musai eran hijas de la diosa de la memoria y de Zeus, ellas escogían y concedían a mortales el don de la creación y sentido estético del arte.
En la época clásica Platón se preguntó: ¿el artista nace o se hace?, señala que los dioses intervenían en la inspiración del artista, este invocaba a las musas y a Apolo, en el proceso creativo unían lo bello, lo bueno, la verdad y lo justo, era divino. Existía la dualidad entre ingenio y el arte, lo artístico podía ser a través de lo divino o a través del conocimiento; porque no todos los artistas dominan su arte, por ejemplo: los poetas escriben poemas, pero no todos declaman; asimismo fue uno de los primeros pensadores que hacía mención sobre los efectos en el seguidor y el poder persuasivo del artista con los ciudadanos.
Sobre el punto, el ser humano necesitó agruparse, manifestarse y dejar huella creativa, fue así que creó la comunidad con una economía y estética coherente a su realidad física, en función de esa necesidad las comunidades comenzaron a generar cultura y fue esa expresión la que se denominó más tarde, arte. De este modo un espectáculo artístico chino mostrará el perfeccionismo y minuciosidad de aquella sociedad o como en las décadas de los sesenta y setenta, en el contexto latinoamericano de dictaduras, surge en Brasil un gran exponente del Teatro Comunitario: Augusto Boal (1931-2009), el cual constituyó el teatro en un medio de concienciación ideológica que propendía el cambio social, el teatro se convirtió en una herramienta para reflexionar sobre el pasado, trasformar la realidad y proyectarse al futuro.
Por otro lado Aristóteles llega al mismo concepto explicado líneas arriba, el artista crea simbologías entre el arte y la sociedad. Asimismo señala que el arte es una producción con conocimiento racional y también menciona como Platón los efectos en el seguidor del artista, lo explica como un efecto catártico (liberación emocional) por parte del artista, y el seguidor es quien se identifica con esa emoción porque percibe lo mismo.
En los conceptos románticos tenemos a Jhon Locke (1632-1704), señala que la inspiración artística son ideas que se asocian entre sí mediante una cadena de acontecimientos en la mente, se llaman según el autor “ideas resonantes”. Los artistas son capaces de ver la unidad de las percepciones y discernir las diferencias en los grupos mediante la fantasía y la imaginación.
Edward Young (1683-1765) es otro estudioso de la inspiración artística de la época romántica, señala que el artista tiene un Dios interno denominado “Genius”, es una fuente inexplicable de inspiración, está en la mente de las personas alejado de lo demoniaco, es una cualidad supernatural.
Con respecto a los conceptos de la época moderna, específicamente de la corriente psicoanalítica con su mayor exponente Sigmud Freud (1856-1939), señala que la inspiración se encuentra en la psique del artista y sale de un conflicto psicológico no resuelto o trauma infantil, Freud menciona que “fundamentalmente el artista es especial y fundamentalmente herido”. Con respecto al proceso creativo y el creador del artista, lo compara con el proceso neurótico; porque tiene un material psíquico reprimido, por ese motivo siente placer al descargar la pulsión que lo reprime, tiene la necesidad de expresarse a su manera, Freud también hace hincapié sobre la conexión entre el artista y su seguidor.
Carl Jung (1875-1961), señala que el artista es alguien que está en sintonía con la memoria racial, es decir con los arquetipos de la sociedad, arrastra la memoria y personalidades de nuestros antepasados, lo expresa según al tipo psicológico que posee, es decir al modelo de carácter; asimismo hace mención de los tipos fundamentales de artistas como el intelectual, el sentimental, el perceptivo y el intuitivo.
Alfred Adler (1870-1937), señala que el artista utiliza la imaginación lo cual es producto de un valor compensatorio de los sentimientos de inferioridad, al fantasear crea su propio mundo según su estilo individual; es decir el artista necesita una sobre compensación de búsqueda de éxito y logro, ese complejo de inferioridad desencadena en un síndrome de superioridad y puede presentar un comportamiento esquizotípico severo.
Los autores psicoanalistas deducen que a mayor dolor del artista logrará mayor creatividad y realce en su creación; por cierto no están lejos de la verdad, si recorremos el tiempo nos encontramos con “destacados artistas” que hicieron historia en la humanidad; pero tenían problemas mentales: El pintor Vincent Van Gogh (1853-1890), Edvard Munch (1863-1944) autor de la gran obra “el grito”, Virginia Woolf (1882-1941), Alfonsina Storni (1892-1938), Ernest Hemingway (1899-1961), entre tantos que podemos mencionar con problemas de alcoholismo, trastorno bipolar, o artistas con habilidades interpersonales inestables, comportamiento y ropa excéntrica, depresión, distorsión cognitiva y perceptiva; pero con un arte sin igual.
En los conceptos de la época contemporánea se encuentra Charles Mauron (1899-1966), con el estudio de la psicocritica referente a la literatura, definía la inspiración artística como un sistema de relaciones entre las palabras e imágenes, con respecto al proceso creador era como soñar despierto, también señala que el artista utiliza sus propios símbolos, redes metafóricas referente al vínculo del artista con su vida; es decir ese proceso creador es un autoanálisis del artista donde vuelve a sus traumas infantiles.
Lev Vogosky (1896-1934), señala que la inspiración artística es imaginación y fantasía para crear arte, el mundo de la cultura tiene elementos artísticos producto de la imaginación del hombre según la formación y estimulo que recibió en la infancia, según el autor es importante fomentar la creación artística en la escolaridad.
En conclusión puedo decir que la inspiración artística es exógena y endógena, tiene relación con la creatividad, motivación y estado de ánimo (vida emocional), es una creación psicológica, social, cultural y sobre todo humana.
Por lo antecedido, la inspiración es mística y única del artista, con ciertas características patológicas o no –el artista es un ser especial-. Tuve la oportunidad de leer la vida de muchos escritores, por esa razón quiero realzar a la escritora, poeta, periodista y docente guatemalteca Isabel de los Ángeles Ruano (1945), empezó a padecer trastornos mentales, hoy todavía deambula por la capital, vestida de varón y alejada de la realidad, vende sus hermosos versos poéticos en la calle, ganadora del Premio Nacional de Literatura “Miguel Ángel Asturias” el 2001. A ella mi homenaje:
Simplemente Isabel
Calles plenas con tu voz caminante
rocían fulgurante poesía
de versos dorados, viento sangrante
ropaje de hombre y mujer ambrosía.
El tumulto de tu razón andante
dulcifica a la orquídea en el día
y al ensueño del ocaso flagrante,
elogian la brisa con armonía.
Poeta del invierno y el verano
reina de proeza y albur gitano,
sagaz como el aire del mirabel.
¡Loca!, gritan, pues que linda locura
preludio vivaz de quieta dulzura.
¿Loca? ¡Jamás! Simplemente Isabel.
