Gualberto Lizarraga Ferrel
- Antecedentes
En estos cerca de 8 meses de gobierno, la presidente Jeanine Añez Chávez y su equipo de colaboradores, no han logrado articular respuestas coherentes contra los actos de corrupción y de narcotráfico, permitidos por el gobierno de Evo-Álvaro, el ministro de gobierno Murillo, parece ya un parlanchín que solo denuncia, apresa y amenaza a sus contrincantes del régimen renunciante del 10 de noviembre del 2019, no se ven resultados concretos sobre la apertura de un juicio de responsabilidades a las ex autoridades del MAS, deja funcionando el Congreso y libres a los parlamentarios que, con dos tercios, avalaron y premiaron actos delictivos cometidos por autoridades de diferente rango durante 14 años, el único preso Carlos Romero, de quien nadie sabe en que esta ese proceso judicial, de los asilados en la embajada de México, tampoco se informa al país, y por el contrario, a los renunciantes y autoridades del MAS, el gobierno de transición les ha dado alas para volar en su imaginación de seguir acusando al gobierno transitorio de golpista y a ninguno de los que eso afirman les hacen proceso alguno por mentirosos y encubridores de sus jefes en huida. A este paso, ya no habrán mas pititas defendiendo a Añez sino castigándola, por su adorable sensibilidad contra los tiranos y corruptos que viven en un paraíso de ricos, siendo ladrones, conspiradores y perversos.
Los dos objetivo que se propuso la presidente Añez, el primero, la Asamblea Plurinacional designo a los vocales del TSE y el gobierno hizo lo propio con su cuota parte, se estableció la fecha de realización de las elecciones generales en dos oportunidades que fueron alterándose en el cronograma, por la Pandemia del COVD-19, que es su tabla de salvación del ejecutivo, al mismo tiempo que es su descredito de moralidad por las denuncias de corrupción en compra de ventiladores y algunas designaciones jerárquicas que, apenas se posesionaron, al corto plazo ya campeaban denuncias de corrupción, tal es caso del presidente de YPFB, a quienes no se le procesa tan ágilmente como al ex Ministro de Salud y 4 implicados presuntos de la compra de 75 ventiladores.
Los ahora opositores del MAS al gobierno de transición, desde la Asamblea Plurinacional, con descaro y sin vergüenza alguna, siguen promoviendo la aprobación de leyes que se les ocurre para crear una mala imagen contra dicho régimen y este nada dice ni responde a los portavoces como Arce Catacora, Flores, Paco, Aguilar, Brito y otros que se turnan para hablar en nombre del MAS, llamándola golpista, gobierno de facto, etc., dentro el país, sin que ninguno de ellos sean procesados por falsas calumnias, ser parte de vulnerar la CPE, decir medias verdades y encubrir actos delictivos de sus fugados autoridades en el mes de noviembre del 2019. Al parecer, el gobierno de transición se ha puesto al servicio del MAS, contra los candidatos Carlos Mesa, Tuto Quiroga, Camacho y otros que, unidos o separados hoy, son la fuerza que desplazara al MAS de sus aspiraciones de volver al poder y no dejar sin castigo a los corruptos y vende patrias del MAS, que a nombre del socialismo, medraron la imagen de grandes intelectuales del campo popular como Marcelo Quiroga Santa Cruz, Andrés Solís Rada, otros. Llegara el día en que los autoproclamados izquierdistas del MAS, tendrán que pagar las deudas a la población y al país lo que han saqueado a nombre del socialismo, haciendo ricos a muchos dirigentes sindicales y movimientos sociales que se prestaron a la estafa del socialismo, empezando de Evo terminando en sus operadores políticos con alta rentabilidad por sus mentiras, los delitos cometidos y encubiertos a son de lucha contra la corrupción, la discriminación, el racismo y las mentiras institucionalizadas que, al final, resultan ser nada más que buenas intenciones con malas acciones delincuenciales.
Este cuadro señalado de conductas y actitudes, llenos de resentimiento político, nos muestra a un gobierno de transición totalmente falto de autoridad, temeroso de no tomar medidas que en política se prevén contra los actos vandálicos, bloqueos de carreteras y ataque a la policía y médicos, que actúan contra la ley de la crisis sanitaria, desacatan la cuarentena, salen contra toda medida de protección a la población de parte del Estado, atacan a los policías, pegan a los médicos, exigen trabajar, hasta aparecen tantos pobres extremos y medios que el anterior gobierno decía que había reducido en porcentajes admirables, dinamitan postes y antenas que se dan el lujo de mentir, aduciendo que los postes o antenas son los que contagian del corona virus a la población, todos estos actos delincuenciales se permiten gente del MAS y a nadie se lo sanciona ni se le encarcela.
La lucha política sobrepasa la pandemia, la gente utilizada y remunerada del MAS exige elecciones, critica al gobierno, por no atender oportunamente a los infectados y no equipar hospitales, no dotar de recursos humanos ni asignar presupuesto al Ministerio de Salud, todo esto que el MAS y sus autoridades no hicieron durante 14 años en el poder, ahora quieren que en tres meses de cuarentena este todo funcionando fluidamente, eso se llama actuar con mentalidad inhumana y provocando más muertes por hacer que salgan a la calle a realizar actos reñidos con la seguridad ciudadana y precautelando los derechos humanos para la vida y no para delinquir, al que en 14 años acostumbro el MAS a sus militantes y beneficiarios a mentir, estafar, extorsionar, fugar capital y vender los recursos naturales a la altura de sus intereses partidarios y no los del país.
- Pecados capitales del gobierno de transicion
En la política, cualquier pequeño o gran error se constituyen en los pecados capitales, para el caso del gobierno de transición, pueden describirse los siguientes aspectos que le darán constantes dolores de cabeza, como causas de este malestar por la que atraviesa la realidad socioeconómica agravada por la crisis sanitaria:
No haber cerrado el parlamento y cesado en sus funciones a los parlamentarios, al momento de la sucesión constitucional. Esta medida solo podía ser un freno y acierto de un gobierno de transición que ya no requería parlamento ni parlamentarios, sino gobernar con decretos supremos por su carácter de transición, no debía permitirse la ampliación de funciones y cargos de los asambleístas ni de los jueces que, todo el pueblo conoce de que nivel de confianza gozan sus integrantes, en su mayoría responden a directrices de las autoridades renunciantes y gozan de la confianza de aquellos, al ser nominados contra todo principio de ética y legitimidad en los cargos que ocupan. De similar modo, debía conformarse el TSE con ciudadanos que no debían salir de la nominación congresal sino de la ciudadanía organizada. Es así que el 22 de enero del 2020, ese gobierno emergente de la renuncia de Evo-Álvaro, dejo de ser tal y la presidente sucesora, actuar en consecuencia de la crisis política institucional, sin las ataduras que impone la legalidad rota por el MAS. Se sabía de antemano que, el MAS no logro estructurarse como Partido político, sino como grupos corporativos que defendían sus intereses, todos ellos, en sí, fueron y son enemigos de los partidos políticos, odian el trabajo orgánico, pero se jactan de ser un instrumento de soberanía de los pueblos y nunca actuaron como tal, muestra de ello es que sin Evo-Álvaro no son nada, hasta los que se consideran lumbreras de la economía política se someten, no como militante, sino, como una ficha mas del poder económico de su jefe. Al cuadro político formado como tal se respeta y se lo protege, aunque también a los gánsteres se los dota de toda una cuadrilla de matones que defienden a su jefe, por temor a ser sancionado por la paga que perciben, mientras que en un partido político a la militancia se lo forma, se le respeta y ensalza por su convicción y consecuencia a su ideología y principios, antes que por la plata que perciben los amarra huatos o llunkus.
Haberse postulado como candidata a la presidencia por JUNTOS, en las elecciones generales. Lamentablemente, con esa pretensión dejo de actuar como presidente de transición para intentar beneficiarse de las circunstancias, insuflada por algún asesoramiento que detrás de ella sigue moviendo los hilos del poder masista. Al correr los días y meses, se va mostrando, en su condición de aspirante a la presidencia constitucional, en cuyo avance llega a Bolivia la pandemia del corona virus, a la que se ve obligada, como presidente, encarar con valencia, como el momento de su toma de mando del país, pero en condiciones totalmente desventajosas en materia de salud, ya que en 14 años el alaraqueo de Evo-Álvaro, no se habían sensibilizado con la población, aunque al final de su gestión, optan por el S.U.S., sin equipamiento adecuado, si recursos humanos, sin presupuesto disponible, sin empeñarse en hacer realidad el derecho de la población en general a la salud pública y que desde la pandemia, los servicios de salud privado, farmacias, clínicas y profesionales, miran todo con ojos lucrativos, convirtiendo así el servicio de salud como el momento de mayor generación de bonanza acosta de la pandemia.
Mantener en cargos jerárquicos a militantes del MAS y designar ministros a cualquier ciudadano meritorio o tecnócrata apolítico y no con amplia formación y experiencia política. No se puede dejar de mencionar que en estos 8 meses nada ha cambiado en la modalidad del manejo y administración del estado, como lo hizo en 14 años el MAS, tiempo que instintivamente, aseguraron pega para su militancia en la administración pública, sobre todo en cargos de direcciones en las 21 entidades del Estado, si bien cesaron a muchos servidores públicos, dejaron a los estrategas del saber hacer negocios, esconder información comprometedora de la pésima gestión en muchos proyectos y adjudicaciones, por otra parte, al momento de hacer reemplazo de los salientes por los entrantes a esos cargos, miraron mas a sus parientes, amistades cercanos y a los de su entorno de las designadas autoridades, que de hacer política jamás estaban de acuerdo y de algunos creyentes de que sería suficiente algún tecnócrata que no milite en ningún partido político, en concreto, estaban convencidos de que no debían estar en el gobierno de transición ningún político, sino mas bien varios cívicos y empresarios privados aspirantes a ser ricos de la noche a la mañana o de beneficiarse rápidamente de algún beneficio económico, a como dé lugar.
Reemplazar a servidores públicos y en mandos jerárquico, con personal sin experiencia política y administrativa en la administración pública. Las mismas prácticas del prebendalismo, las mismas artimañas aprendidas en 14 años de jolgorio masista, la réplica de costumbres adquiridas en los negocios con bienes del Estado, las mismas habilidades de apropiación de recursos sin mucho esfuerzo, el abuso de confianza de los subalternos sobre sus jefes y de hacer lo que sea por los subalternos por quedar bien con sus jefes.
Vivir de la solidaridad y el altruismo de las personas e instituciones de buena voluntad para llevar alimentos, vituallas y otros requeridos por las familias sin empleo fijo, teniendo al estado, encargado de hacer llegar los recursos previstos en el presupuesto de imprevistos, salvo, claro está, que el estado no tenga recursos que tanto publicito el MAS de alcanzar una reserva millonaria del estado y que ante la pandemia se tenga que recurrir a la donación del 50% del sueldo de la presidenta y sus colaboradores, la ayuda internacional y otros ingresos que debían elevarse a las ganancias de los grandes comerciantes y empresarios que deben capital al estado y siguen pidiendo mas y mas, para ellos existe recursos, para las familias en condiciones precarias de vida, se decretan créditos a bajos intereses y plazos largos de amortización, no se sabe si es con o sin mantenimiento del valor.
Realizar gastos millonarios en publicidad presidencial, como parte de la campaña electoral y el uso de bienes del Estado para fines particulares, la misma practica que tenia Evo-Álvaro y sus ministros, debemos entender que un gobierno que está atendiendo una emergencia sanitaria, no tiene porque publicitar diariamente la compra, entrega y uso de los equipos de bioseguridad a la población, mucho menos la contratación o asignación de items al personal de salud para prestar servicios a la población necesitada, para eso se tienen los informes de gestión, tampoco hay que acostumbrar a las empresas de comunicación a engrosar sus ingresos vía publicidad que paga el estado, cuando estos tienen, como principio, el servicio a la comunidad sin costo alguno. El manejo político partidario debe ser erogado por sus militantes, no por el estado, dudamos que la imagen de la presidente tenga que ser manejada como si estuviéramos en campaña electoral o elección de reinas, estando en la administración del estado y no de su Partido político.
Dar cabida permanente a parlamentarios del MAS en espacios televisivos o de prensa oral y escrita, para hacer campaña electoral, diciendo lo que les conviene, fundados en la libertad de pensamiento, para descalificar a sus adversarios sin la menor prueba de sus aseveraciones. De similar modo que hace el gobierno contra Carlos Mesa y sus miembros para favorecer al MAS y no a su candidatura en realidad.
- Debilidades en la pandemia
Desde el mes de marzo de 2020, en que se anuncia las primeras infeccione del coronavirus, en el país, el gobierno asumió con buen criterio y responsabilidad el decretar la cuarentena, a cuya medida surgieron los opositores de diferentes sectores barriales en la ciudad de El Alto, Sacaba, Kara kara, Chapare y otros, oponiéndose a dicha medida, los comerciantes como los transportistas no ven con buenos ojos dicha medida preventiva de control a las infecciones, los parlamentarios del MAS exigen elecciones y aprueban leyes fijando fechas en contravención a la sugerida por el TSE, salen a las calles con bloqueos, voladura de torres de alta tensión, desobedecen entrar en cuarentena y niegan que sea verdad el virus, se enfrentan a los policías, maltratan a los médicos y ejercen toda la presión posible a no entrar en cuarentena rígida u otra, hasta que las infecciones se incrementan, en casos de algunos dirigentes sindicales y autoridades municipales que se infectan, situación que, al final, obliga a programar a los Gobiernos Municipales las modalidades de la cuarentena, cuyo impacto de infecciones conducen a que muchos hospitales colapsen para la atención a los pacientes y los hornos crematorios acumulen muchos difuntos al sobrepasar su capacidad.
Los masistas son responsables, en gran medida, de la cantidad de infectados y muertos por el COVID-19, merced a las directrices impartidas para convulsionar el país y conspirar contra el gobierno de transición que, desde el exilio Evo Morales Ayma y de la COB, amenazan que si no renuncia al presidente, de igual manera se tendría que ir por las elecciones, antes que por causa de la pandemia se prorrogue, este régimen golpista. El gobierno hace oídos sordos a las iniciativas de candidatos, como de la C.C., a que se convoque a reunión de partidos políticos para tomar medidas de reactivación de la economía y el control de la pandemia, así mismo fijar postura clara sobre la fecha de realización de las elecciones generales en el país.
La adquisición de 75 respiradores de España, estalla en una presunta acción de corrupción en personeros del gobierno, se imputa al Ministro de Salud y otros 4 personas involucradas en dicha adquisición con sobreprecio, desde la presidencia se enfatiza que, se dará con los culpables y caiga quien caiga, será drásticamente sancionada, expresiones del mismo estilo de Evo, que al final son palabras y mas palabras, que no se cristalizan y se enfría el caso hasta el presente, sin conocerse la verdad de las denuncias sobre hechos de corrupción, lo que los masistas, desde el parlamento, aprovechan para salir a criticar al gobierno de transición, en el intento de hacer olvidar lo que ellos hicieron con el país y sus habitantes durante 14 años de derroche, corrupción y delitos incontables que duermen el sueño de ángeles y arcángeles sin mancha.
- Conclusiones y recomendaciones
Desde nuestra lectura de la realidad socio económico y político del país, el gobierno de transición, en estos 8 meses, ha empezado a mostrarse con grandes debilidades ante dos prioridades internas (Elecciones nacionales y la reactivación económica) y una externa (la Pandemia del Coronavirus).
Esta realidad agudiza la contradicción entre lo político y la pandemia, donde las elecciones generales dejan de ser prioridad en el país, porque la pandemia, en guerra contra la especie humana, va cobrando vidas, por la acción desconocida del virus que, apenas se atina a tomar medidas preventivas, inicialmente algo tardías y de enfrentarla casi al azar, ocasionando la salida de la sensibilidad humana a guerrear con lo que se puede, descubriendo que no se cuenta con los instrumentos que le hagan frente y solo se atina a batallar con lo poco que se había logrado en materia de salud en estos últimos 14 años.
La lucha política interna se debate entre dar prioridad a las elecciones generales y la reactivación económica y la atención a la crisis sanitaria que ha agudizado la pandemia como medio de generación de riqueza merced a la salud humana que cada vez es más cara y costosa para aquellos que no pueden pagar y de difícil atención inmediata para quienes pueden pagar.
La pandemia siendo un virus que hace guerra a la humanidad, es también la continuación de la política internacional por este medio, cuyo objetivo, al parecer, es que este virus se expanda hasta que en determinado momento se cuente con las vacunas eliminando preliminarmente a cuantos seres vivos hayan declinado ante su componente mortal luego de generar ingresos económicos cuantiosos a la industria sanitaria, y después, será otro tanto lo que puedan lucrar con la vacuna en el planeta.
La falta de autoridad bien asesorada y con conocimiento de la práctica política que conlleva la administración del estado, conduce necesariamente a vivir sujeto a la cooperación internacional, según las políticas a las que responden sus acciones de apoyo a los gobiernos, las campañas de solidaridad y la solidaridad de la gente, en forma de limosna, antes que enseñar a pescar se les da el pescado, que en algún momento se acaba con este recurso y se queden sin aprender a pescar y seguir esperando se les siga dando el pescado.
Una política de estado, bien concreta, que el gobierno debe asumir, se puede emprender en medidas como ser:
Replicar la experiencia del rastrillaje a contagiados con el virus casa por casa, estableciendo el estado real en que están cada uno de los miembros de las familias visitadas por equipos técnico profesionales de tipo multidisciplinario bajo la dirección de médicos especializados en detección del virus por análisis de laboratorio oportuno, por los síntomas del paciente y observando los estados de ánimo de cada ciudadano ante la pandemia.
Identificar, con equipos multidisciplinarios, el estado de situación critica alimentaria y nutricional en que se encuentran la mayoría de las familias en cada barrio y planificar la adquisición, organización de paquetes o productos de la canasta familiar básicos requeridos por familias, según la cantidad de miembros que viven bajo el mismo techo cada 15 días, conformando comités de amas de casa e instituciones públicas para su distribución o entrega de los mismos a cargo de brigadas de seguridad y defensa con apoyo de la policía y las FFAA; cuyos costos deben ser pagados por el estado de manera general, antes que dar bonos que obligan a que la cuarentena no se cumpla.
Hay que replegar a la policía y las FFAA a sus unidades y cuarteles a conformar las brigadas que entreguen casa por casa los alimentos básicos en cada barrio, con todas las normas de bioseguridad y cumpliendo los protocolos pertinentes para cada fenómeno emergente, cada 15 días, de modo que ningún ciudadano salga de su vivienda o casa con motivo de proveerse de alimentos y otras necesidades de salud.
En cada municipio, debe instalarse un horno crematorio para las víctimas del coronavirus, así como disponer de todos los medios y recursos para su incineración con todos los requisitos de identificación y registro de defunción que sus familiares puedan estar seguros de dicho servicio.
A partir de que se constate la reducción de las infecciones, entonces programar la normalización de actividades productivas, inicialmente en aquellos sectores generadores de los ingresos económicos al país, hidrocarburos, minería, agropecuaria y el turismo, garantizado el control del virus, es decir ganada la batalla al virus, normalizar las actividades públicas y privadas referidas a la administración y servicios, así, paulatinamente retornar a las actividades regulares del sistema económico boliviano, restringiendo plenamente la circulación de los motorizados del servicio público y el comercio, con especial énfasis en la economía informal que debe formalizarse definitivamente.
Mediante los equipos multidisciplinarios debería establecerse los niveles de formación técnica, académica y mano de obra calificada de los desempleados para, en su momento requeridos por el Estado, en sus diferentes niveles, se los contrate o dote de ítems, sobre todo en aquellos rubros productivos que aseguren y garanticen el normal aprovisionamiento de necesidades básicas en la población y sea así que todos los bolivianos en edad de trabajar sean orientados y transferidos a prestar sus servicios, según sus cualidades, aptitudes, vocación, habilidades y destrezas de modo que sean un aporte al país y no una simple funcionario de Estado que gana sin contribuir al aparato productivo, sino cooptado por su militancia política por el gobierno de turno que malea fácilmente y no permite su postura crítica y propositiva.
Una cuarentena total en el país es una necesidad de vida y, por ello, vale la pena cumplir conscientemente dicha medida, destacando, a quienes incumplan, asumir por cuenta propia su contagio, los derechos dan obligaciones, en consecuencia, se atengan a las consecuencias quienes no marchan al son de las leyes y normas establecidas en la sociedad, en estas condiciones las luchas sociales tienen que ser por la vida y respeto de la vida, ya que no tiene sentido, en los seres humanos, ser portador de ideologías si estas no se conjugan a favor de la vida, la existencia digna y las realizaciones con esfuerzos y renuncias a placeres y gustos individuales.
La guerra contra la pandemia, es como la defensa a la soberanía e integridad territorial y poblacional, estos son los recursos más esenciales que tiene un Estado, en efecto, ningún ciudadano, sea cual sea su origen social, el color de su piel o los bienes que posee y proteja su orgullo per se, puede, ni debe escatimar esfuerzo alguno, tratándose de preservar la vida y el espacio donde ha nacido, se ha formado y vive, encarando esta guerra no declarada por el virus, debe tener respuestas eficaces, aislándose la población de sus efectos de contagio, vivir un encierro temporal, hasta enviar de retoro el virus al lugar de donde proviene y caer sobre quienes han propagado este virus letal, de manera que, entonces, como los tercos a acatar, paguen su error por no comprender el atentado a la existencia de la especie humana y de estos, contra la naturaleza, por excesiva codicia, maldad y afán de mantener el poder hegemónico a cualquier costo.
Bajo la responsabilidad del estado, los científicos bolivianos, desde las Universidades y centros de investigación biotecnológica y químico farmacéutico, deben investigar el origen del virus, descubrir su composición químico biológico y producir la dosis o el antídoto, para extirpar esta plaga maligna, y sea la especie humana quien haya tomado conciencia de la importancia de estar en interacción con la naturaleza bajo la egida del respeto mutuo y la reciprocidad a sus necesidades de convivencia armónica e integral.
