Epitafio
Armando Alanís – México
Volveré.
Secretos de familia
Maritza Iriarte – Perú
Mamá tomó la pistola sin saber que estaba descargada. Papá le quitó las balas y afilo el cuchillo de cocina. Esta vez me tocará limpiar el desastre y, la próxima vez, elegir una nueva mamá.
Mutación
Virginia Gonzáles Dorta- España
Coge la tortuga con sus manitas infantiles y acaricia el caparazón lleno de estrías. La tortuga, recelosa, lo mira: imposible sea tan distinto de uno de aquellos huevos que una noche de luna llena puso en la playa.
Yoga
Carlos Gutiérrez Andrade – Bolivia
El padre del yoga seguramente fue un gato. No solo por la disciplina, sino por sus bigotes infinitos que nos recuerda a un viejo shaolin monacal.
Sabor a mar
Felicidad Batista – España
Aquel era un mar bravío y solitario. Inaccesible a los pies de un acantilado gigante, bramaba noche y día. Asustaba a bañistas, pescadores y caminantes que contemplaban el espectáculo cerúleo y de espumas rompientes.
Una noche encontré a la luna al borde del acantilado. Emergía de las aguas. Navegué despacio por la estela temblorosa que dejaba. Pero mi barca crujía y en un giro, el mar despertó. Una ola dentada se desplomó sobre mí. Empapada, llegué a puerto. Pero ni una brizna de sal rozó mi piel o se quedó en mi vestido.
Descubrí entonces la razón por la que espantaba a quienes se acercaban. No quería que nadie supiera que era un mar dulce.